Tocamientos, separación familiar y presiones psicológicas durante la detención: abusos que están creando una nueva generación perdida
MADRID, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
Cuatro de cada cinco menores palestinos detenidos por el Ejército israelí son objeto de abusos físicos bajo custodia de los militares, según revela una investigación de Save the Children que detalla incluso agresiones o tocamientos en sus genitales, desnudos forzados, restricción a su acceso a comida y medicamentos así como a sus familiares, en una odisea que desemboca en insomnio y pesadillas para una nueva generación completamente desilusionada con su futuro dentro del conflicto israelo-palestino.
La nueva investigación se lanza coincidiendo con la presentación que realizará, este lunes, la relatora especial sobre la situación de los Derechos Humanos en los territorios palestinos ocupados, Francesca Albanese, ante el Consejo para los Derechos Humanos de la ONU, ante el que presentará pruebas sobre las circunstancias de las detenciones anuales de entre 500 y 1.000 menores que acaban retenidos en centros de detención militar israelíes.
Los menores, denuncia la ONG, son interrogados en lugares desconocidos sin la presencia de sus padres o tutores legal, a veces sin poder pedir asistencia a los abogados. El principal presunto delito de estas detenciones es el lanzamiento de piedras, recuerda Save the Children, algo que puede conllevar una pena de 20 años de prisión para los niños y niñas palestinos.
La ONG, a través de esta investigación que ha tomado como base un estudio a 228 menores -- la inmensa mayoría chicos que acabaron entre los 12 y los 17 años bajo custodia israelí -- denuncia estos abusos como "un grave y prolongado problema de violación de Derechos Humanos" y pide a Israel que ponga fin a la detención de menores de edad palestinos en virtud de la legislación militar y a su enjuiciamiento en tribunales militares.
Save the Children, cabe destacar, considera que el número de participantes es perfectamente representativo dada que la media mensual de jóvenes palestinos detenidos por Israel es de 137 menores.
GOLPES, DESNUDOS Y TOCAMIENTOS
Cuatro de cada cinco niños y niñas palestinos detenidos por Israel reciben golpes y un 69 por ciento son desnudados a la fuerza. Casi la mitad (42 por ciento) sufre lesiones en el momento de la detención, como heridas de bala y fracturas óseas. Algunos niños han denunciado violencia y abusos de índole sexual, como golpes o tocamientos en los genitales, y el 69 por ciento, cacheos.
Asimismo el 60 por ciento de los niños fueron sometidos a régimen de aislamiento, con una duración que osciló entre uno y 48 días, se les negó el acceso a los servicios básicos -- el 70 por ciento dijo padecer hambre y el 68 por ciento afirmó no recibir atención sanitaria -- y al 58 por ciento de los niños se les negaron las visitas o la comunicación con su familia mientras estuvieron detenidos.
"El soldado amenazó con matarme cuando me detuvo por segunda vez", recuerda Jalil, bajo un nombre ficticio. "Me preguntó si quería correr la misma suerte que su primo, ya que a él lo habían matado. Me prometió que a mí me pasaría lo mismo y que moriría, pero que antes me enviaría a la cárcel. Me dijo que volvería a por mí y todos los días espero a que llegue ese día", añade.
Hay niños que llegan incluso a reconocer presiones psicológicas por parte del Ejército israelí para incriminar a sus familiares. "Mi hijo era ingenuo y no entendía lo que estaba pasando. Dijo lo que le dijeron que dijera; unos días después, vinieron a nuestra casa y detuvieron a mi otro hijo", lamenta Yasmin (nombre también ficticio) sobre lo ocurrido a uno de sus hijos.
Por todo ello, el número de niños y niñas que tienen pesadillas frecuentes ha aumentado del 39 por ciento al 53 por ciento y el de los que sufren insomnio o dificultades para dormir se ha disparado del 47 por ciento al 73 por ciento, en comparación con los niños y niñas encuestados en 2020.
El director de Save the Children para los Territorios Palestinos Ocupados, Jason Lee, recuerda que los niños palestinos son "los únicos del mundo que experimentan un enjuiciamiento sistemático en tribunales militares". "Nuestra investigación demuestra -una vez más- que son objeto de abusos graves y generalizados a manos de quienes se supone que deben cuidar de ellos", añade.
Lee denuncia que no hay justificación para golpear y desnudar a los niños, tratarlos como animales o robarles su futuro: "Se trata de una crisis de protección de la infancia que no puede seguir ignorándose. Debe ponerse fin de una vez a este abusivo sistema de detención militar", concluye.
Save the Children pide a Israel que respete todos los derechos de la infancia y el derecho internacional, y demanda una moratoria inmediata sobre el arresto, la detención y el procesamiento de niños por parte de las autoridades militares israelíes.