LA HABANA, 17 Ago. (Reuters/EP) -
El Gobierno cubano ha puesto en alerta a su sistema de defensa civil por una extensa sequía que amenaza con empeorar en los próximos meses, después de causar estragos en los cultivos y dejar sin agua potable a un millón de personas.
La sequía ha perjudicado al campo cubano, especialmente a las plantaciones de tabaco, azúcar, arroz, café y frijoles, fundamentales para la economía de la isla caribeña pero también para la dieta de sus habitantes.
Además, ha tenido un gran impacto social porque ha dejado a uno de cada diez residentes en Cuba sin acceso al agua potable, lo que ha obligado al Gobierno a distribuirla en camiones cisterna y a racionar su consumo.
Las condiciones de sequía en todo el mar Caribe, causadas por el fenómeno conocido como 'El Niño', han dejado los embalses cubanos al 37 por ciento de su capacidad y la situación podría empeorar porque se esperan pocas precipitaciones en la temporada de lluvias.
Hace siete años que un huracán no afecta a todo el territorio cubano, algo que normalmente ocurre cada temporada y que trae como consecuencia lluvias torrenciales.
Este contexto podría obligar al régimen 'castrista' a tomar decisiones difíciles sobre la distribución del agua para la siembra de invierno, la temporada turística y la molienda de caña de azúcar, que comienzan en noviembre.