Reclaman crear un registro de pasajeros aéreos para combatir la amenaza de los yihadistas europeos
BRUSELAS, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los jefes de Estado y de Gobierno de los 28 han dado hoy a Rusia una semana de plazo para reducir la tensión en el este de Ucrania o de lo contrario aprobarán una nueva ronda de sanciones económicas contra Moscú.
Los líderes europeos "están preparados para adoptar medidas adicionales significativas a la luz de la evolución de la situación sobre el terreno y pide a la Comisión que prepare urgentemente y presente propuestas para su consideración en una semana", ha dicho el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, al término de la cumbre extraordinaria en Bruselas.
Van Rompuy ha explicado que no hay "criterios precisos" para activar las nuevas sanciones económicas, aunque ha resaltado que "todo el mundo es plenamente consciente de que tenemos que actuar rápidamente dada la evolución sobre el terreno y la trágica pérdida de vidas de los últimos días y probablemente los próximos teniendo en cuenta la situación militar".
Al tiempo que la Comisión prepara las nuevas sanciones, se iniciarán las consultas con los Estados miembros a principios de la semana que viene para adoptar una decisión final lo ante posible. "El proceso de toma de decisiones se ha acelerado de una forma que no tiene precedentes desde el estallido de la crisis", ha asegurado el presidente del Consejo Europeo.
Por su parte, el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, ha dicho que será "rápido" a la hora de presentar las propuestas. Barroso ha pedido a Rusia que se siente a negociar y ha destacado que "no puede haber una solución militar a esta crisis". "No tiene sentido este nuevo tipo de conflicto o una nueva guerra fría", ha resaltado.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reiterado el apoyo a Ucrania por la "situación dramática" que vive el país y ha apostado por "incrementar el diálogo político" con Rusia para resolver la crisis "a la mayor celeridad posible". También ha explicado que, además de trabajara en nuevas sanciones, el Consejo ha pedido a la Comisión Europea que "siga vigilando" el impacto de este conflicto en el sector hortofrutícola --unos 300 millones de euros en el caso español--, por si fuera preciso adoptar "nuevas medidas" de compensación.
COMBATIR AL ESTADO ISLÁMICO
Los jefes de Estado y de Gobierno de la UE han examinado también el empeoramiento de la situación en Oriente Próximo y, en particular, la amenaza del grupo extremista suní Estado Islámico. Los líderes europeos han expresado su respaldo a los Estados miembros que tienen previsto enviar material militar a Irak y se han comprometido a estudiar medidas para privar al Estado Islámico de "ingresos ilegales del petróleo".
Además, el Consejo Europeo ha convertido en "prioridad" combatir la radicalización en territorio comunitario y adoptar nuevas medidas para detener el flujo de ciudadanos europeos a zonas de conflicto como Siria o Irak, en particular mediante la creación de un registro de pasajeros aéreos como el que ya existe en Estados Unidos. La Eurocámara ha bloqueado hasta ahora esta iniciativa por considerar que vulnera las normas de protección de datos.