MADRID, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
La niña de 11 años que se quedó embarazada al ser violada por la pareja de su madre ha dado a luz este jueves, devolviendo a la primera plana de la prensa paraguaya un caso que ha reabierto el debate sobre las agresiones sexuales a menores en el país suramericano.
'Mainumby', el nombre ficticio que las autoridades paraguayas han dado a la joven madre, ha dado a luz a una niña de 3 kilos y 50 gramos en el Hospital Reina Sofía que gestiona Cruz Roja en Asunción, según ha informado el director de la ONG en la capital, Mario Villalba.
La niña se ha sometido a una césarea "que ha ido como cualquier otra, pero con la diferencia de la edad", ha dicho Villalba a una radio local. Tanto la madre como la bebé están bien y se espera que, de seguir esta evolución, reciban el alta en tres días.
Las dos menores quedarán bajo la tutela de la madre de 'Mainumby', que está en libertad condicional a la espera de que la justicia paraguaya determine su responsabilidad en las presuntas agresiones sexuales a su hija.
El caso salió a la luz el pasado 21 de abril, cuando la niña --entonces de 10 años-- acudió junto a su madre a un hospital de Asunción con dolores estomacales. Los médicos descubrieron que estaba embarazada y la menor confesó que había sido violada por su padrastro.
El hombre, de 42 años de edad, fue detenido inmediatamente y desde entonces está recluido en la Penitenciaría de Tacumbú, aunque él sostiene que es inocente. La madre también fue arrestada por, supuestamente, encubrir los hechos.
'Mainumby' recobró el debate sobre las numerosas agresiones sexuales a menores en Paraguay --y en general en América Latina--, así como sobre la respuesta que las autoridades han dado, que en la mayoría de los casos pasa por prohibir el aborto.
En este caso, tanto la niña como su madre y varias ONG y relatores de Naciones Unidas especializados en asuntos sobre mujer reclamaron la interrupción del embarazado, pero el Estado paraguayo se negó, apegándose al tenor de la ley.
La ley sobre el aborto en Paraguay sólo autoriza la interrupción del embarazo cuando la vida de la gestante corre un grave peligro y no contempla excepciones en casos de violación o de que el feto sea inviable.