La ONG sostiene que se ha empleado en al menos 18 ocasiones en las seis últimas semanas
MADRID, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
La operación militar conjunta que llevan a cabo el Gobierno sirio y Rusia ha estado empleando armamento incendiario en áreas civiles en las últimas semanas en las ciudades de Alepo e Idlib, según ha denunciado este martes Human Rights Watch (HRW), que ha advertido de que ello constituye una violación del Derecho Internacional.
Según la organización, este tipo de armamento, que provoca quemaduras en sus víctimas y desata incendios, se ha empleado en hasta 18 ocasiones en las seis últimas semanas, incluidos ataques contra zonas opositoras en las ciudades de Alepo e Idlib registrados el 7 de agosto.
"El Gobierno sirio y Rusia deberían dejar inmediatamente de atacar áreas civiles con armamento incendiario", ha reclamado el director de armas de HRW, Steve Goose. "Estas armas provocan heridas horribles e infligen un terrible dolor, así que todos los países deberían condenar su uso en zonas civiles", ha añadido.
En este sentido, HRW ha reclamado a los países que acudirán a la reunión de la Convención sobre Armamento Convencional que se celebra en Ginebra el 29 de agosto que condenen el uso de bombas incendiarias lanzadas desde el aire en zonas civiles en Siria en violación del protocolo existente en la materia.
En base a las fotos y los vídeos a los que ha tenido acceso la organización de los ataques y a los restos de los mismos, HRW ha llegado a la conclusión de que se han producido al menos 18 ataques con armamento incendiario contra zonas bajo control rebelde en las provincias de Alepo e Idlib entre el 5 de junio y el 10 de agosto. Al menos doce civiles resultaron heridos en cinco de dichos ataques, según testigos y personal de emergencia.
Activistas locales, organizaciones de Derechos Humanos, equipos de emergencia y medios han informado del uso de armamento incendiario en al menos otras 40 ocasiones, si bien no había fotos o vídeos disponibles, por lo que HRW no ha podido contrastarlo.
Según la organización internacional, los ataques con armas incendiarias en Siria se han incrementado desde que Rusia inició su intervención en apoyo del régimen de Bashar al Assad en septiembre de 2015. En este sentido, ha sostenido que hay "pruebas convincentes de que aviones rusos están siendo usados para entregar armamento incendiario o al menos están participando junto a los aviones sirios en ataques usando" este tipo de armas.
"Los vergonzosos ataques con armamento incendiario en Siria muestran una miserable falta de respeto del Derecho Internacional que restringe" este tipo de armas, ha denunciado Goose, que ha defendido la necesidad de "endurecer urgentemente" las normas que las regulan. "Desde un punto de vista humanitario, una prohibición global del armamento incendiario sería la mejor solución", ha sostenido.