MADRID 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
El secretario británico del 'Brexit', David Davis, ha rechazado las demandas de la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, para un acuerdo de Escocia a medida con la Unión Europea. Al tiempo que ha sugerido que se opondrá a las propuestas del Partido Nacionalista Escocés(SNP, por sus siglas en inglés) de transferir más poderes a Edimburgo después de que Reino Unido abandone el bloque en 2019.
Preguntado por la petición de controlar la competencia sobre inmigración y la posibilidad de Escocia de cerrar acuerdos con países extranjeros, Davis ha recordado que ambas competencias, inmigración y asuntos exteriores, son reservadas a la administración central. "Es complicado pensar cómo políticas migratorias separadas podrían funcionar en alguna parte del Reino", ha afirmado en declaraciones recogidas por el diario 'Herald Scotland'.
El secretario británico, de visita en Glasgow, ha reafirmado la postura de Londres de que los acuerdos para abandonar la UE serán "los acuerdos de Reino Unido", desacreditando así las sugerencias de Sturgeon de un posible acuerdo entre el bloque y Escocia.
"Tiene que ser el acuerdo de Reino Unido, pero por supuesto reflejará los intereses del pueblo de Escocia. Tiene que representar los intereses de Irlanda del Norte, Gales e Inglaterra también", ha apuntado Davis.
"El objetivo es conseguir el máximo posible de libre acceso al mercado de la Unión Europea, al tiempo que acceder a otros mercados globales (...) ¿Cómo lograrlo?... no estamos todavía en ese escenario", ha declarado el ministro británico.
Sobre las promesas políticas de Sturgeon de convocar un segundo referéndum de independencia, el político británico lo ha descartado asegurando que "los escoceses no quieren otro referéndum".
Sturgeon, no podrá convocar este referéndum hasta que Escocia esté en proceso de salida de la Unión Europea, ya que la primera ministra británica, Theresa May, ha confirmado su voluntad de activar el proceso formal para culminar el 'Brexit' antes de que concluya el mes de marzo de 2017.
Pese a ello, el SNP ha amagado con convocarlo si sus planes son rechazados y Escocia vive "un Brexit brusco". De hecho, se espera que esta semana se redacte la ley que permitirá la segunda convocatoria de referéndum. Sturgeon subrayó este miércoles su determinación para que los votantes puedan considerar, una vez más, abandonar Reino Unido si se demuestra que es la "mejor" o la "única manera" de salvaguardar los intereses del país, después de la decisión de Reino Unido de abandonar la Unión Europea.
En la última consulta, el Gobierno escocés advirtió de que se necesitarían 18 meses si los ciudadanos optaban por el 'sí' en la consulta para que Escocia se convirtiera en un país independiente, tiempo similar al que tendría que enfrentarse, independientemente de que el segundo referéndum saliera victorioso, con Londres abandonando el club europeo.