ADDIS ABEBA, 8 Mar. (Reuters/EP) -
Decenas de estudiantes universitarios se han manifestado este martes en la capital de Etiopía, Addis Abeba, en contra de la represión policial, después de varios meses de protesta acerca de los planes de expropiación agraria del Gobierno en la región de Oromía.
El plan del Ejecutivo para desarrollar la agricultura alrededor de la capital ha despertado una de las mayores protestas civiles en una década, que se ha cobrado al menos 200 víctimas, según varios grupos para la defensa de los Derechos Humanos y disidentes exiliados en Estados Unidos.
A pesar de que las autoridades etíopes descartaron los planes de reforma agraria en enero, las manifestaciones esporádicas persisten. Este martes, decenas de estudiantes de la universidad de Addis Abeba han marchado en dos grupos hacia la Embajada de Estados Unidos en la ciudad, portando consignas como las siguientes: "No somos terroristas. Dejad de matar al pueblo Oromo".
El primer ministro de Etiopía, Hailemariam Desalegn, ha prometido abordar las reclamaciones de la región de Oromía y ha acusado a los grupos rebeldes de incitar a la violencia. Un cargo que los manifestantes rechazan.
"El propósito es subrayar los abusos cometidos en la región", ha contestado un estudiante que no ha querido ser identificado por temor a posibles represalias. "Hemos agitado prendas blancas para indicar que somos manifestantes pacíficos. Pero la Policía ha empezado a golpearnos", ha añadido. En Etiopía las protestas son escasas por la fuerte represión policial y del Gobierno.
El mes pasado, Human Rights Watch explicó que algunos de los manifestantes con los que había hablado, y que habían sido detenidos tras el estallido de las protestas de noviembre, fueron sometidos a palizas y nunca aparecieron antes de juicio.
La organización también señaló que varias mujeres fueron víctimas de abusos sexuales y maltrato, entre ellas una estudiante, de 18 años de edad, que recibió "fuertes descargas eléctricas en los pies".
Etiopía, que tradicionalmente ha sido una de las naciones africanas más pobres, ha experimentado un rápido proceso de industrialización en la última década, con una economía en pleno crecimiento. No obstante, la redistribución de la tierra es un tema controvertido entre los etíopes, muchos de los cuales practican una agricultura de subsistencia.