MADRID, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
La delegación de la oposición Siria que participa en las conversaciones de paz en Ginebra ha rechazado este martes la propuesta de Damasco sobre un gobierno de unidad nacional, recalcando que "el régimen busca mantener todo el poder en sus manos".
"El régimen no quiere cambio en Siria", ha dicho el jefe de la delegación, Nasr al Hariri, en una entrevista concedida a la agencia estatal turca de noticias, Anatolia.
Así, ha recalcado que la oposición "no ha pedido un gobierno de unidad", sino "la aplicación de las resoluciones del Consejo de Seguridad Nacional y el comunicado de Ginebra, que piden una transición política que comienza con la formación de un organismo de transición con poder ejecutivo a través de un mecanismo acordado en el que participen el régimen, la oposición y otros".
"No hay ninguna resolución internacional, comunicado de ningún grupo internacional, resolución del Consejo de Seguridad (de la ONU), o declaración de un Estado particular que pida un gobierno de unidad nacional. Sólo el régimen lo ha planteado", ha argumentado.
En este sentido, ha señalado que la oposición "quiere una nueva Constitución que se base en los estándares internacionales, junto con elecciones libres y justas", reconociendo que "este asunto tiene su propio contexto espacial y temporal".
Pese a ello, ha expresado su deseo de "alcanzar una solución política lo antes posible", diciendo que "sería positivo lograr un acuerdo con el enviado especial de la ONU (Staffan de Mistura) sobre métodos y agenda con los que se pueda empezar la próxima ronda de conversaciones".
"Somos serios respecto a lograr una solución política", ha insistido Al Hariri, asegurando que "la delegación de negociación (opositora) no busca el poder". "Queremos establecer una base para la paz en Siria a través de una solución política", ha reiterado.
Sin embargo, ha indicado que Damasco "no tiene interés" en discutir una transición, una nueva Constitución o elecciones". Así, ha dicho que el presidente, Bashar al Assad, "ha adoptado un eslogan desde el inicio de la revolución: 'Al Assad, o quemamos el país'".
La delegación opositora ha recibido un documento por parte de la ONU que han descrito como "procedimental", agregando que tienen "algunas reservas sobre la agenda de conversaciones".
Al Hariri ha sido además crítico con la Administración del expresidente estadounidense Barack Obama, lamentando que "el pueblo sirio ha pagado un gran precio por los desastrosos errores de Obama".
El jefe de la delegación opositora ha recordado que "la Administración Obama estableció 'líneas rojas' y luego permitió al régimen excederlas y permitió a Irán intervenir en Siria".
Por ello, ha pedido a Washington que tome la iniciativa para acabar con el "mandato diabólico" de Irán en la región, presentando a la oposición como "un aliado real y efectivo en la lucha contra el terrorismo".