MADRID, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos ha puesto fin al Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) para los inmigrantes nicaragüenses, una decisión que entrará en vigor a partir de 2019 y que afectará principalmente a unos 2.500 ciudadanos provenientes de Nicaragua, que serán susceptibles de ser deportados a su país.
Por otra parte, las autoridades estadounidenses han ampliado otros seis meses el TPS para unos 57.000 inmigrantes hondureños hasta julio de 2018, según ha informado el diario local 'The Washington Post'.
Otros 200.000 salvadoreños y uno 50.000 haitianos se encuentran a la espera de saber si podrán permanecer en el país. La decisión de poner fin al estatus forma parte de las medidas puestas en marcha por la Administración del presidente, Donald Trump, para incrementar las restricciones a la inmigración.
Durante la campaña que lo llevó a la Casa Blanca, el magnate estadounidense prometió que si ganaba las elecciones iba a deportar a un gran número de inmigrantes.
El TPS fue otorgado a los ciudadanos de estos países en 1999 después de que un huracán devastara Centroamérica. De él se beneficiaban hasta la fecha unas 300.000 personas provenientes de nueve países diferentes.
El diario ha asegurado que el secretario de Estado, Rex Tillerson, dijo el martes en una carta a la secretaria de Seguridad Nacional, Elaine Duke, que las condiciones en América Central y Haití que habían sido usadas para justificar la protección ya no son aplicables.