MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio del Interior de Túnez anunció el sábado el desmantelamiento de dos redes de envío de personas a zonas de conflicto en las localidades de Yerba y Sfax, operaciones que se han saldado con la detención de trece personas.
En su comunicado, el ministerio ha detallado que una célula dedicada al reclutamiento de combatientes y compuesta por cinco personas fue desmantelada en Yerba, ubicada en la provincia de Mededine.
Los interrogatorios a los detenidos habrían confirmado sus lazos con el grupo yihadista Estado Islámico. Los reclutados eran enviados a Siria a través de Libia y Turquía.
Por otra parte, ocho personas han sido detenidas en Sfax cuando pretendían unirse a la citada formación extremista, según ha informado la agencia estatal tunecina de noticias, TAP.
Túnez está en máxima alerta desde el ataque contra el Museo del Bardo en marzo, en el que murieron una veintena de turistas, y el atentado en la playa de Susa en junio, que se saldó con 38 extranjeros fallecidos, la mayoría británicos.
El presidente tunecino, Beyi Caid Essebsi, decretó a principios de julio el estado de emergencia para dar temporalmente más flexibilidad ejecutiva el Gobierno y otorgando al Ejército y a la Policía más autoridad. La medida restringe ciertos derechos como el de reunión.
La última vez que Túnez declaró el estado de emergencia fue en 2011, durante la revuelta contra el autócrata Zine el Abidine ben Alí, quien abandonó el país en enero de ese año y quien reside desde entonces en Arabia Saudí.