MADRID, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -
Al menos 150.000 civiles se han visto desplazados en el noroeste de Siria a causa del recrudecimiento de los combates entre el Ejército de Siria y los rebeldes en las provincias de Idlib y Alepo desde principios de enero, según datos del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
El organismo ha señalado que la violencia en la ciudad de Alepo ha llegado a "una intensidad no vista allí desde 2016", incluidos los ataques con proyectiles por parte de rebeldes y yihadistas contra barrios residenciales.
"En las zonas rurales del oeste de Alepo y en la provincia de Idlib, mientras tanto, los intensos combates ha provocado un incremento de los niveles de sufrimiento de las familias que se encuentran allí", ha manifestado.
Lorenzo Redalié, jefe de la oficina del CICR en Alepo, ha resaltado que "durante los últimos días ha habido continuados bombardeos y ataques con artillería en la ciudad de Alepo", mientras que "en Idlib y la zona rural del oeste de Alepo los combates llevan activos desde hace meses".
"Si no se adoptan precauciones básicas, el número de víctimas será mayor. Nos veremos enfrentado a supervivientes gravemente traumatizados y servicios debilitados a un nivel cercano al colapso total", ha dicho.
Por ello, el organismo ha pedido a todas las partes que pongan fin a sus ataques contra civiles e infraestructura civil, que respeten y protejan al personal e instalaciones médicas, y que respeten y protejan a los que no participan en los combates, particularmente a niños, mujeres y ancianos.
Asimismo, ha solicitado que se permita a los trabajadores humanitarios llevar a cabo su trabajo y ha advertido de que si no se cumplen las reglas de la guerra "habrá consecuencias humanitarias desastrosas que pueden durar años".
Por último, el CICR ha resaltado que tanto la organización como la Media Luna Árabe Siria (SARC) están dispuestos a incrementar su respuesta humanitaria en el país, a ambos lados de las líneas de frente, para ayudar a las personas afectadas por el conflicto.
La provincia de Idlib y zonas de las de Alepo y Hama se encuentran en manos de varios grupos armados, el más importante de los cuales es el grupo yihadista Hayat Tahrir al Sham (HTS). El Gobierno de Siria ha defendido que la ofensiva es parte de su lucha contra el terrorismo en el país.
A punto de cumplirse el noveno aniversario del inicio de la guerra civil en Siria, el Gobierno del presidente sirio, Bashar Al Assad, ya ha recuperado el control de casi todo el territorio sirio, a excepción de zonas de Idlib y partes del norte y el noreste del país, donde operan milicias kurdas y grupos rebeldes apoyados por Ankara tras su ofensiva contra los grupos kurdos en la zona fronteriza.