PRISTINA 25 May. (Reuters/EP) -
Moshe Harel, acusado de pertenecer a una red de tráfico de órganos de Kosovo que fue descubierta en 2008, ha sido arrestado este viernes en Israel, según han informado este viernes la misión de la Unión Europea en el país, EULEX.
La Policía en Kosovo acusa al israelí Harel de dirigir una red de crimen organizado que prometía el pago de 15.000 euros a personas de países de los Balcanes, Turquía o las ex repúblicas soviéticas a cambio de uno de sus órganos. No está claro si las personas al final recibían el dinero.
Harel, de nacionalidad israelí, ha sido arrestado junto a varias personas en el marco de una investigación paralela en Israel. El detenido buscaba además a las personas que necesitaban un trasplante para vender los órganos a un precio que oscilaba entre 80.000 y 100.000 euros.
El escándalo salió a la luz en 2008 cuando un hombre turco fue detenido en el aeropuerto de Pristina mientras se quejaba de dolores en la espalda, aunque más tarde se comprobaría que le habían retirado un riñón.
La red operaba en la clínica Medicus, situada en un barrio residencial a las afueras de Pristina. El dueño del centro, Lutfi Dervishi, su hijo y otras cinco personas están siendo juzgadas por tráfico de órganos. Yusuf Ercin Sonmez, cirujano turco, está en busca y captura por pertenecer a la organización.
"Harel es el sospechoso clave en una investigación de Israel separada pero paralela sobre Medicus que comenzó en junio de 2011, en la que está acusado de tráfico de personas y crimen organizado", ha señalado EULEX en un comunicado.
El fiscal de la misión europea Jonathan Ratel ha señalado que la organización pedirá la extradición de Harel, según varios medios kosovares. Entre los principales sospechosos de esta red, destaca el ex ministro de Sanidad Ilir Rrecaj.
El Consejo de Europa publicó en 2010 un informe sobre el tráfico de órganos que realizó la guerrilla kosovar Ejército de liberación de Kosovo (UCK) durante los enfrentamientos con las tropas serbias. El actual primer ministro kosovar, Hashim Thaci, que fue miembro de dicha guerrilla, estaría implicado en esta red de tráfico que extraía órganos a los soldados serbios y los vendía en el mercado negro.