DAR ES SALAAM (TANZANIA), 2 (Reuters/EP)
Una mujer ha sido arrestada en Tanzania tras aparecer en un vídeo en el que abraza, besa y le regala un anillo a otra mujer, vídeo que fue ampliamente difundido por las redes sociales en un país donde la homosexualidad es delito.
La detenida reside en la ciudad de Geita, en el noroeste de Tanzania, según la Policía. En el país tener "conocimiento carnal de cualquier persona contra el orden de la naturaleza" puede acarrear cadena perpetua.
"Puedo confirmar que una mujer de Tanzania está bajo custodia policial por ese video. Más adelante emitiremos más detalles cuando concluyamos nuestra investigación", ha declarado a Reuters el jefe de Policía de Geita, Mponjoli Mwabulambo. También se está buscando a la mujer que recibía el anillo en el vídeo.
El vídeo fue duramente criticado por los usuarios de las redes sociales en las que fue difundido, dado el carácter conservador de la sociedad tanzana, y algunos usuarios se referían al contenido como "inmoral". "Las dos deberían ser arrestadas. ¿Por qué la mujer aceptó un anillo de compromiso de otra mujer?", publicó uno de los usuarios, Cosme Alele, en Twitter.
El Gobierno del presidente de Tanzania, John Magufuli, ha intensificado las medidas represivas contra la homosexualidad desde que llegó al poder en 2015 y amenazó el pasado junio con arrestar y expulsar a los activistas, así como anular el registro de todas las organizaciones no gubernamentales que luchan por los derechos de los homosexuales.
El pasado octubre, las autoridades de la ciudad de Dar es Salaam irrumpieron durante la celebración de una reunión en un hotel alegando que promovía relaciones entre personas del mismo sexo y arrestaron al menos a doce hombres.
Dado que la homosexualidad es un delito en Tanzania, los grupos de Derechos Humanos son reacios a hablar en defensa de los derechos de los homosexuales.
El ministro de Sanidad de Tanzania prohibió a las ONG distribuir lubricantes como parte de una campaña de prevención y control del sida y el VIH en 2016. Alrededor de 1,4 millones de tanzanos viven con el VIH, el virus que causa el sida, entre una población de más de 50 millones de personas, según estimaciones del Gobierno. Algunos expertos alertan de que terminar con estos programas de prevención puede aumentar el riesgo de infecciones entre la población.