WASHINGTON, 1 Mar. (Reuters/EP) -
El director de la Oficina Federal de Investigación (FBI) de Estados Unidos, James Comey, ha admitido este martes que el desbloqueo del teléfono iPhone de uno de los responsables de la masacre de San Bernardino (California) sentaría precedentes para otros casos.
Apple se ha negado a cumplir una orden judicial para ayudar al FBI en las investigaciones del tiroteo, en el que perdieron la vida 14 personas. La empresa que fundó Steve Jobs argumenta que si permite el acceso al iPhone las autoridades podrían utilizar esta colaboración para entrar en otros teléfonos.
Comey aseguró la semana pasada que era "improbable" que el desbloqueo sentase precedentes, pero este martes, durante una comparecencia ante el Congreso, ha sugerido lo contrario. Al ser preguntado por los aparatos de Apple a los que el FBI querría tener acceso, el directos ha afirmado que hay "muchos" con información necesaria para investigaciones.
Un juez federal de Brooklyn determinó el lunes que el Gobierno de Estados Unidos no puede obligar a Apple a desbloquear un iPhone en un caso de drogas de Nueva York, un fallo que refuerza los argumentos de la empresa en su enfrentamiento legal con el Departamento de Justicia sobre la privacidad de sus clientes.