NUEVA YORK, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El director de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos, el general Keith Alexander, ha acusado este domingo al extrabajador de la agencia Edward Snowden de traicionar la confianza del país al revelar datos clasificados de programas secretos de vigilancia y ha asegurado que todas las operaciones en este sentido se realizan dentro de la legalidad al contar con una orden judicial.
"Está claro que es un individuo que ha traicionado la confianza que teníamos depositada en él. Se trata de un hombre que no está actuando, en mi opinión, con nobles propósitos", declaró a la cadena ABC.
Para el general, la filtración de Snowden se debió a un fallo del sistema. "Está claro que el sistema no funcionó como debería", declaró. Snowden "era un hombre que gozaba de total acceso y que tenía la labor de administrar las redes de datos", indicó.
Alexander indicó que tras el "robo" perpetrado por Snowden, la NSA ha incrementado el control sobre sus administradores de sistema. "Estamos poniendo en prácticas medidas para rastrear lo que hacen y qué es lo que se llevan. Pero al final siempre se trata de una cuestión de confianza", apuntó. "Y cuando lo hacen, tenemos que recurrir al Departamento de Justicia para que emprenda las correspondientes acciones", manifestó.
Por otro lado, Alexander defendió que los programas secretos revelados por Snowden están amparados por la legalidad representada en el Acta de Vigilancia de Inteligencia Exterior, que "lo deja bien claro: para que la NSA rastree el contenido de las comunicaciones de un individuo en cualquier parte del mundo, es necesario una orden judicial específica", defendió.
"Si estamos buscando a un terrorista extranjero, quien habla con un ciudadano estadounidense que reside dentro de nuestras fronteras, nosotros seguimos dicha ley", hizo saber. "Estamos regulados por los tribunales, por el Departamento de Justicia, por la Casa Blanca, por el Congreso: nos supervisan las tres ramas del Gobierno", declaró.