El atentado ha sido condenado por todos los partidos con representación parlamentaria
LONDRES, 20 (EUROPA PRESS)
La Policía de Irlanda del Norte ha informado de la detención de cuatro personas en relación con el coche bomba que estalló en la noche del sábado junto a los juzgados de Londonderry/Derry, en Irlanda del Norte, una acción que las autoridades atribuyen al Nuevo IRA, una escisión del Ejército Republicano Irlandés.
En la mañana de este domingo la Policía ha informado del arresto de dos personas de 41 y 49 años aplicándoles la Ley Antiterrorista. Dos personas más fueron detenidas por la tarde. "Detectives que investigan la explosión de anoche ocurrida cerca de los juzgados de la calle Bishop de Derry/Londonderry han arrestado a dos hombres más de 34 y 42 años", ha explicado la Policía a través de su cuenta en Twitter.
Los medios informan de una "amplia operación" policial en Londonderry tras el atentado, que no ha sido reivindicado por ningún grupo concreto. Sin embargo, el brazo político del Nuevo IRA, Saoradh, ha informado de "un ataque de republicanos revolucionarios contra el tribunal británico" y ha denunciado la operación de las fuerzas de seguridad para "llevarse a republicanos". "Esperamos que estos chicos vuelvan pronto a casa", ha apuntado.
"Este ataque se produce en la víspera del centenario del ataque de Soloheadbeg, en el que Seán Treacy y sus camaradas asestaron un histórico revés a las Fuerzas de la Corona en Tipperary. Parece que cien años después los camaradas de Seán Treacy siguen con la revolución inacabada", ha añadido la organización.
La Policía recibió un aviso telefónico 15 minutos antes de la explosión del artefacto colocado en una furgoneta de reparto de pizza que había sido robada poco antes por dos encapuchados. Sin embargo, los agentes no lograron terminar la evacuación antes de la deflagración, que afortunadamente no causó daños personales.
"En torno a las 19.55 horas de anoche los agentes de patrulla en la calle Bishop avistaron un vehículo sospechoso y estaban investigando. Cinco minutos después se recibió la información de que había un artefacto en el tribunal", ha explicado el 'número dos' de la Policía norirlandesa, Mark Hamilton.
"De inmediato comenzamos a evacuar a la gente de los edificios cercanos, entre ellos cientos de huéspedes de un hotel, 150 personas del Salón Masón y los niños de un club juvenil de una iglesia. El artefacto detonó a las 20.10 horas", ha indicado Hamilton, quien calificó el atentado de "increíblemente imprudente".
"Afortunadamente los atacantes no lograron matar ni herir a ningún miembro de la comunidad que habían salido a disfrutar de la ciudad. Los responsables de este ataque no tienen respeto alguno por la comunidad ni los negocios locales. Poco les importa el daño y los problemas que han causado", ha apostillado.
CONDENA DE TODOS LOS PARTIDOS CON REPRESENTACIÓN
El alcalde de Derry, John Boyle, del Partido Socialdemócrata y Laborista norirlandés, ha lamentado "tener que estar una vez más frente a un cordón policial tras una explosión en el centro de la ciudad". "Esta noche estoy muy triste porque sé que la gente de esta ciudad quiere avanzar y construir un futuro mejor, pero una minoría de nuestra comunidad quiere arrastrarnos de nuevo al pasado y, lo que es peor, amenazar nuestras vidas", ha argumentado.
La diputada electa por la circunscripción de Derry, Elisha McCallion, del partido republicano Sinn Féin, ha condenado este atentado. "Este incidente ha conmocionado a la comunidad. Había muchos ancianos que viven en la zona que se han asustado por este incidente. Afortunadamente parece que no hay heridos", ha señalado.
"Derry es una ciudad que avanza y nadie quiere este tipo de incidentes. No represntan a la ciudad. Animo a cualquiera con información de este incidente a que se la proporcione a la Policía", ha agregado.
También desde Irlanda su ministro de Asuntos Exteiores ha condenado este "atentado terrorista con coche bomba". "No hay cabida ni justificación posible para tales actos de terrorismo que buscan arrastrar a Irlanda del Norte de nuevo a la violencia y el conflicto", ha argumentado.
La secretaria de Estado para Irlanda del Norte del Gobierno británico, Karen Bradley, ha denunciado igualmente este "intento de impedir el avance de Irlanda del Norte que ha sido claramente condenado por todos los sectores de la comunidad". "El pequeño número de personas responsables no tienen absolutamente nada que ofrecer al futuro de Irlanda del Norte y no vencerán", ha apostillado.
"Este acto de terrorismo sin sentido debe ser condenado en los términos más duros. Agradecida a nuestros servicios de emergencia y a su rápida intervención que permitió garantizar que no haya víctimas mortales ni heridos", ha apuntado a través de Twitter la líder del Partido Unionista Democrático (DUP), Arlene Foster.
Los Acuerdos de Viernes Santo de 1998 pusieron fin en buena medida a tres décadas de violencia en el Ulster entre protestantes, que querían permanecer en Reino Unido, y católicos, partidarios de la unificación con Irlanda, pero ha seguido habiendo actos de violencia esporádicos.
Los grupos escindidos del Ejército Republicano Irlandés (IRA) han perpetrado ataques contra policías y miembros de las fuerzas de seguridad en los últimos años. En 2012, un funcionario de prisiones norirlandés murió en un tiroteo en una carretera atribuido a estos grupos, el primer asesinato de este tipo desde 1993.