ESTOCOLMO, 11 Nov. (DPA/EP) -
Dos altos ejecutivos de una compañía petrolera de Suecia han sido imputados este jueves en el país europeo por supuestamente ayudar e instigar crímenes de guerra en Sudán.
Después de años de investigaciones preliminares, los fiscales suecos han anunciado su intención de presentar cargos contra los dos ejecutivos, acusados de complicidad en la comisión de crímenes de guerra perpetrados por el régimen sudanés entre 1999 y 2003, supuestamente para asegurar la continuación de las operaciones de la compañía para la que trabajaban.
De acuerdo con los fiscales, que han investigado el caso durante once años, los dos sospechosos tuvieron una "influencia decisiva" en los negocios que su compañía, entonces llamada Lundin Oil y hoy conocida como Lundin Energy, llevaba a cabo en Sudán.
La acusación pide a la empresa una suma de casi 160 millones de dólares (más de 139,7 millones de euros), lo que calculan que ha ganó de beneficios cuando vendió sus negocios en Sudán en 2003.
La compañía ha señalado que los cargos contra los altos ejecutivos "no tienen base", mientras que los acusados han rechazado los cargos, aduciendo que actuaron con el completo "apoyo" de los gerentes de la empresa. Uno de ellos ha señalado que la decisión es "incomprensible", según un comunicado de la propia empresa.