Archivo - Daños materiales en el campamento de refugiados de Nur Shams, en Cisjordania, tras una operación del Ejército de Israel (archivo) - Europa Press/Contacto/Nasser Ishtayeh - Archivo
MADRID, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Ejército de Israel ha llevado a cabo este miércoles un bombardeo con un dron contra "terroristas" en el marco de una nueva operación de las fuerzas de seguridad en el campamento de refugiados de Nur al Shams, en Cisjordania, sin que por ahora haya un balance de víctimas.
Así, ha indicado que "durante la operación, un aparato de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ha atacado a terroristas que lanzaron explosivos contra las fuerzas y las pusieron en peligro", antes de agregar que "hay impactos detectados".
"La operación continúa en estos momentos", ha recalcado, antes de indicar que "decenas de sospechosos" han sido detenidos, incluidas seis personas que figuraban entre los objetivos de la operación, tal y como recoge un comunicado publicado por el Ejército israelí en su página web.
En este sentido, ha resaltado que más de 2.570 personas han sido detenidas desde el 7 de octubre, fecha de los ataques ejecutados por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), incluidas cerca de 1.300 que mantendrían lazos con el grupo islamista palestino.
Según las informaciones recogidas por la agencia palestina de noticias WAFA, las fuerzas israelíes irrumpieron a última hora del martes en el campamento de Nur Shams, situado en la ciudad cisjordana de Tulkarem, donde han provocado una importante destrucción de infraestructura, incluidas calles que han sido levantadas por buldóceres blindados.
El Alto Comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Volker Turk, reclamó la semana pasada a Israel que "ponga fin a las ejecuciones extrajudiciales y la violencia de los colonos" contra la población palestina, incluido "el fin inmediato del uso de armas y medios militares durante operaciones de seguridad".
"El uso de tácticas y armas militares en el contexto de operaciones de seguridad, el uso de una fuerza innecesaria y desproporcionada y la aplicación de restricciones de movimiento amplias, arbitrarias y discriminatorias que afectan a los palestinos son extremadamente preocupantes", dijo, antes de apuntar a un "drástico aumento" de los bombardeos y las incursiones por parte de vehículos blindados y buldóceres en los campamentos de refugiados palestinos.
Estas operaciones se saldaron con 105 muertos, entre ellos 23 niños, durante el periodo entre el 7 de octubre y el 27 de diciembre. De forma previa al 7 de octubre, 200 palestinos habían muerto en esta zona en 2023, la cifra más alta en un periodo de diez meses desde que la ONU empezó a realizar registros de este tipo en 2005, reflejo del repunte de la violencia en la zona ya antes de los ataques ejecutados por Hamás contra Israel, que dejaron cerca de 1.200 muertos y unos 240 secuestrados.
Al aumento de la violencia en Cisjordania y Jerusalén Este se suma la ofensiva militar israelí contra la Franja de Gaza, que ha dejado hasta ahora más de 22.300 muertos y cerca de 57.300 heridos, según el último balance publicado por las autoridades gazatíes, controladas por el grupo islamista palestino.