MADRID, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
La líder del Partido Democrático Unionista (DUP) de Irlanda del Norte, Arlene Foster, ha subrayado este miércoles que no aceptará un acuerdo sobre el Brexit que "disminuya" la posición del territorio en Reino Unido.
"No cargaremos a generaciones futuras con un acuerdo que disminuya la posición de Irlanda del Norte en Reino Unido", ha dicho, según ha informado el diario local 'The Belfast Telegraph'.
En unas declaraciones formuladas tras un encuentro con el coordinador del grupo de trabajo sobre el Brexit, Guy Verhofstadt, ha criticado que "la Unión Europea (UE) quiere una cabina de peaje de una dirección para Reino Unido y normas de sentido único desde Londres".
Foster rechazó el martes cualquier tipo de control en suelo británico sobre las mercancías cuyo destino sea el Ulster tras la salida de Reino Unido de la UE, tal y como propone el negociador jefe del bloque comunitario para el Brexit, Michel Barnier, y recordó que ésta es "la única 'línea roja'" de su formación.
"No podríamos apoyar ningún acuerdo que diera lugar a barreras aduaneras o regulatorias dentro del mercado interno" de Reino Unido, afirmó Foster en una rueda de prensa en la sede del Parlamento Europeo en Bruselas tras mantener un encuentro con Barnier.
La norirlandesa, cuyo partido apoya al Gobierno de la primera ministra británica, Theresa May, insistió en que "solo hay una 'línea roja' en este asunto y esa es que recibamos un trato diferente por parte del resto de Reino Unido en cuanto a aduanas y alineación normativa", y dijo que lo hace para "proteger la integridad constitucional" británica y la economía de Irlanda del Norte.
Asimismo, Foster explicó que todavía no ha visto la nueva propuesta que May ha anunciado para la frontera irlandesa y que se espera que presente esta semana, y se mostró convencida de que su partido "no está solo" en su posición sobre el Brexit.
La última propuesta del bando negociador europeo, que defiende que Irlanda del Norte siga formando parte de la unión aduanera y partes del mercado único tras el Brexit, pasa por que los controles de bienes procedentes del resto de Reino Unido se lleven a cabo lejos de los puertos de Irlanda del Norte, para evitar que sea visto como una frontera interna dentro del territorio británico, algo que May considera inaceptable.
La cumbre de jefes de Estado y de gobierno de la UE de la semana próxima dará comienzo el miércoles 17 de octubre con una cena de trabajo de los líderes en la que se prevé que May pronuncie un discurso sobre la marcha de las negociaciones del Brexit y su propuesta de futuro.
Tras la intervención de la primera ministra, los Veintisiete discutirán cómo desbloquear las conversaciones para lograr cerrar un acuerdo a finales de octubre o noviembre que pueda ser ratificado a tiempo, y que permita a Reino Unido salir de la UE el 29 de marzo de 2019.