CHICAGO (ESTADOS UNIDOS), 30 (Reuters/EP)
Tres ecografías realizadas en las primeras semanas del embarazo de una finlandesa que vive en Estados Unidos y que se contagió del virus de zika no mostraron señales de daño cerebral en un feto al que luego se le diagnosticó microcefalia, según detalla un estudio publicado este miércoles por investigadores de Estados Unidos.
La mujer no fue identificada, pero el texto indica que resultó infectada durante un viaje de vacaciones a México, Guatemala y Belice en noviembre del 2015. Se desconoce la ubicación exacta de la transmisión.
En la semana 19 de su embarazo aparecieron en las primeras señales de la malformación congénita en una ecografía. Un estudio posterior --en el que se utilizó imágenes por resonancia magnética (MRI)-- mostró amplias anomalías en el cerebro.
Estudios mostraron que el cerebro del feto se contrajo respecto a una circunferencia normal de la cabeza del percentil 47 en la semana 16 al percentil 24 en la semana 20. Aún así, la circunferencia de la cabeza aún no era lo suficientemente pequeña como para ser clasificada como microcefalia, explican los investigadores.
No obstante, dada la extensión de los daños vistos en el MRI, la mujer decidió terminar con el embarazo en la semana 21.
"Lo que nuestro estudio sugiere es que los médicos deberían tener cautela al asegurar a los pacientes que tienen exámenes de ultrasonidos fetales normales al inicio del embarazo", ha dicho Adre du Plessis, director del Instituto de Medicina Fetal del Sistema Nacional de Salud Pediátrica en Washington D.C., uno de los autores del estudio publicado el miércoles en el New England Journal of Medicine.
Du Plessis ha añadido que una única ecografía podría no capturar malformaciones cerebrales del feto asociadas a la infección que podrían empeorar durante el embarazo.
"Hay mucho que no sabemos sobre la actual cepa y brote del virus de zika. Parece comportarse de manera diferente que en el pasado (...) Lo que sí sabemos es que si el cerebro del feto resulta afectado, eso parece ser una situación muy mala", ha sentenciado Du Plessis en una rueda de prensa con periodistas.
Aún se desconoce mucha información sobre el virus de zika, incluyendo si éste realmente causa microcefalia, una malformación congénita que provoca que la cabeza del bebé sea anormalmente pequeña y que no se complete el desarrollo del cerebro.