WASHINGTON, 13 Ago. (Reuters/EP) -
Estados Unidos ha aclarado este jueves que el diálogo que mantiene con Venezuela desde hace meses para superar la última crisis bilateral "es un trabajo en desarrollo" del que no cabe esperar resultados inmediatos.
"Es un trabajo en curso", ha dicho Maximilien Arvelaiz, encargado de negocios de Venezuela en Washington y persona clave en los contactos de alto nivel con diplomáticos del Departamento de Estado.
Arvelaiz ha explicado que "no es que ahora nos entendamos mejor", sino que "después de tantos años de desconfianza, estamos aprendiendo a trabajar juntos y a hablar sobre nuestras diferencias a nivel bilateral".
Así, ha indicado que el objetivo es encontrar un punto de equilibrio en las relaciones entre Washington y Caracas. "Vamos a seguir teniendo nuestras diferencias", ha augurado.
Para Arvelaiz lo importante es que no haya "interferencias" en los asuntos internos de cada país. A este respecto, ha considerado que la "preocupación" de Estados Unidos por los opositores encarcelados demuestra "falta de conocimiento sobre la realidad en Venezuela".
CRISIS BILATERAL
La escalada de tensión comenzó en diciembre, cuando el presidente estadounidense, Barack Obama, firmó una ley para sancionar a los funcionarios venezolanos implicados en las supuestas violaciones de los Derechos Humanos cometidas durante las revueltas opositoras.
Como réplica, el Gobierno de Nicolás Maduro dio el 8 de marzo 15 días a Estados Unidos para reducir el número de trabajadores de su Embajada y exigió que, a partir de ese momento, Washington informara de las reuniones que sus funcionarios mantuvieran en Venezuela.
Apenas un mes después, coincidiendo con la Cumbre de las Américas celebrada en Panamá, comenzaron los contactos de alto nivel encabezados por el diplomático estadounidense Thomas Shannon y la canciller venezolana, Delcy Rodríguez.
Las reuniones han continuado con las sanciones estadounidenses y la situación de la oposición venezolana como temas principales, aunque también se han abordado otros de interés común como el acercamiento con Cuba, el proceso de paz en Colombia y la crisis haitiana.