El primer ministro de Irak, Haider al Abadi
KHALID AL MOUSILY / REUTERS
Actualizado: martes, 3 mayo 2016 1:36


STUTTGART (ALEMANIA), 3 (Reuters/EP)

El secretario de Defensa de Estados Unidos, Ash Carter, ha asegurado este lunes que el primer ministro de Irak, Haider al Abadi, cuenta con una posición firme al frente del país, a pesar de la crisis política y de seguridad.

"Parece estar en una posición muy firme. Obviamente le apoyamos por aquello que defiende", ha dicho poco antes de aterrizar en Alemania, donde realizará una visita diplomática.

En este sentido, Carter ha destacado que los éxitos en los combates contra el grupo yihadista Estado Islámico y su compromiso con un estado multisectario avalan la gestión de Al Abadi al frente de Irak.

El Parlamento del país árabe aprobó la semana pasada una remodelación parcial del Gobierno, dando 'luz verde' a los nominados por el primer ministro a cinco ministerios, lo que no evitó unas protestas que durante el fin de semana derivaron en la entrada de decenas de personas en la sede del organismo.

Centenares de partidarios del influyente clérigo chií Muqtada al Sadr han protagonizado sentadas en la Zona Verde de la capital, Bagdad, para reclamar al Gobierno que actúe ante la corrupción y la inseguridad.

Al Abadi anunció el pasado verano sus planes de lanzar una profunda reforma política para acabar con las cuotas religiosas y sectarias en las instituciones y luchar contra la corrupción, en un intento de reforzar el Estado en medio de la guerra contra el Estado Islámico.

Al Sadr aplaudió las buenas intenciones del primer ministro pero alertó de que, si no cumplía su palabra, impulsaría protestas multitudinarias, que se han sucedido durante las últimas semanas en la capital.

Por otra parte, la seguridad es otro motivo de preocupación, y la Misión de Asistencia de Naciones Unidas para Irak (UNAMI) afirmó el domingo que 410 civiles murieron y otros 973 resultaron heridos en abril a causa de actos de terrorismo, violencia y el conflicto en el país.

En su informe, la misión de la ONU apuntó que al balance de víctimas hay que agregar además a 331 miembros de las fuerzas de seguridad, entre los que ha habido además 401 heridos. Así, el balance total es de 741 muertos y 1.374 heridos.

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