MADRID 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha impuesto este miércoles sanciones contra dos altos cargos de las fuerzas de seguridad de República Democrática del Congo (RDC) por su responsabilidad en graves abusos de los Derechos Humanos.
En su comunicado, el Departamento ha detallado que los sancionados son Gabril Amisi Kumba, conocido como 'Tango Cuatro', un comandante del Ejército la región occidental del país, y John Numbi, un antiguo inspector de la Policía Nacional.
Así, ha detallado que Numbi "llevó a cabo acciones o políticas que minaron el proceso democrático o las instituciones en RDC", mientras que Amisi Kumba "fue el líder de un grupo armado que amenazó la paz, la seguridad y la estabilidad del país".
Como consecuencia, los individuos sancionados verán congelados sus activos bajo jurisdicción estadounidense, mientras que los ciudadanos del país norteamericano tendrán prohibido realizar transacciones con ellos.
Amisi Kumba es un comandante de las Fuerzas Armadas y líder de las mismas en la Primera Zona de Defensa, que incluye las provincias de Bandudu, Bas Congo, Equateur y Kinshasa.
"Estas unidades han participado en la represión violenta de manifestaciones políticas", ha detallado el Departamento, apuntando al "incremento de las violaciones de los derechos a la libertad de expresión, asociación y asamblea en estas provincias, y especialmente en Kinshasa".
"Los soldados del Ejército usaron una fuerza excesiva y armas letales durante manifestaciones y actos políticos, especialmente durante las protestas organizadas por líderes opositores y actores de la sociedad civil en ener de 2015.
Por su parte, Numbi "llevó a cabo intimidación violenta para garantizar la victoria de candidatos afiliados con la coalición del presidente, Joseph Kabila, durante las elecciones de marzo de 2016".
Así, ha asegurado que amenazó con matar a candidatos opositores que no se retiraran de la carrera electoral y dio códigos numéricos a los diputados provinciales para poder verificar que habían votado.
Pese a que ya no forma parte de la administración de RDC, Numbi sigue siendo considerado como un influyente asesor del presidente del país africano.
HRW APLAUDE LAS SANCIONES
En respuesta, la organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) ha aplaudido las sanciones y ha resaltado que "supone un poderoso mensaje de que habrá consecuencias por la represión violenta de manifestaciones y otros abusos graves".
Ida Sawyer, investigadora de la ONG para África, ha afirmado además que "Estados Unidos debería expandir sus sanciones para incluir a otros altos cargos del Gobierno, las fuerzas de seguridad y los servicios de Inteligencia por la brutal represión de los últimos dos años".
HRW ha señalado que, desde enero de 2015, las autoridades han llevado a cabo una campaña de represión contra aquellos que se oponen a que Kabila extienda su poder más allá de los dos mandatos contemplados por la Constitución.
"La Unión Europea y el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas deberían adoptar urgentemente sanciones similares a las de Estados Unidos, ha recomendado Sawyer.
"Una acción firme podría presionar a Kabila para que se ciña a la normativa constitucional y dimita antes de terminar su mandato, lo que evitaría una crisis más amplia que podría tener repercusiones en toda la región", ha remachado.
La represión llegó a sus cotas más altas el 18 de septiembre, cuando las fuerzas de seguridad mataron a al menos 50 personas durante una manifestación contra el mandatario en la capital.
Las protestas fueron convocadas después de que la comisión electoral pidiera la semana pasada al Tribunal Constitucional para posponer los comicios, previstos para noviembre.
Según la comisión, las elecciones podrían retrasarse un año, lo que ha provocado la indignación entre los principales líderes opositores, que consideran que es una maniobra de Kabila para mantenerse en el poder más allá de su mandato.