BRUSELAS, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, ha insistido este viernes en que la última propuesta de Irán en el marco de la negociación para restaurar el acuerdo nuclear "da pasos atrás" en la vuelta al pacto.
"No estamos dispuestos a aceptar un acuerdo que no cumpla con nuestros requisitos básicos e intente introducir continuamente demandas extrañas que no son relevantes para el propio acuerdo", ha asegurado Blinken al ser preguntado en rueda de prensa en la sede de la OTAN.
Sin querer desvelar más detalles, el jefe de la diplomacia estadounidense ha asegurado que se habían acercado posturas las últimas semanas con Teherán, pero la más reciente respuesta al documento final propuesto por la Unión Europea, que ejerce de mediadora, supone dar "pasos atrás".
Blinken ha señalado que Washington solo llegará a un acuerdo si las condiciones suponen una mejora para la seguridad nacional estadounidense. "El presidente (Joe Biden) está enfocado en eso, y lo que vemos otra vez es que solo damos pasos atrás y no hacia adelante", ha lamentado.
El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ya avisó este lunes de que la última demanda de Irán no ayuda a culminar las conversaciones y de hecho pone "en peligro" el proceso.
Según explicó, las condiciones que reclama Irán están suponiendo una "divergencia" en las posiciones de las negociaciones. "Las posiciones están más alejadas, esto es preocupante y todo el proceso está en peligro", ha señalado. Teherán pide ahora más garantías y el cierre de la investigación de su actividad nuclear para confirmar su cumplimiento del acuerdo de 2015.
El proceso diplomático auspiciado por la UE busca restaurar un acuerdo que, pese a que sigue en vigor, está muy dañado después de que Estados Unidos se retiró de forma unilateral durante la etapa de Donald Trump, e Irán incumplió los límites acordados para su actividad nuclear.
Para la UE, la propuesta puesta sobre la mesa por Borrell hace un mes es un documento final que los participantes del acuerdo nuclear deben suscribir o rechazar, tras un proceso de 16 meses de conversaciones, principalmente en Viena, para conseguir que Estados Unidos regrese al acuerdo nuclear iraní.