WASHINGTON, 3 Abr. (Reuters/EP) -
El Gobierno de Estados Unidos ha reclamado este martes a Burundi que rescinda su decisión de retirar la licencia de emisión a la británica BBC y prorrogar de forma indefinida la suspensión que afecta a la emisora estadounidense Voice of America.
"Estados Unidos está muy preocupado por la decisión de Burundi de extender indefinidamente la suspensión de las emisiones de Voice of America y revocar la licencia de operaciones de la BBC", ha señalado en rueda de prensa el portavoz del Departamento de Estado Robert Palladino.
Así, ha sostenido que "esta decisión genera numerosas preocupaciones en torno a la libertad de expresión, contemplada en el artículo 31 de la Constitución burundesa, y sobre las obligaciones internacionales de Burundi en materia de Derechos Humanos".
"Pedimos al Gobierno que rescinda su decisión y le urgimos a permitir a todos los periodistas operar en un ambiente libre de intimidación", ha manifestado, antes de agregar que "unos medios libres e independientes son indispensables para una democracia vibrante y funcional y para unas elecciones libres y justas en 2020".
El Consejo Nacional de Comunicaciones (CNC) de Burundi detalló en un comunicado publicado el 29 de marzo que "la autorización de explotación de la emisora de radio BBC ha sido retirada" y prohibió a los periodistas que se encuentren en el país "entregar de forma directa o indirecta informaciones que puedan ser emitidas" por este medio.
Asimismo, prorrogó la suspensión de las emisiones de Voice of America "hasta nueva orden" y ha prohibido igualmente a los periodistas entregar información al medio. Las órdenes fueron firmadas por el presidente del organismo, Nestor Bankumukunzi.
El CNC suspendió las emisiones de la BBC por un documental que emitió sobre asesinatos por parte de las fuerzas de seguridad en un centro de detención secreto en la capital, Buyumbura, lo que fue tildado de "mentira" por parte de las autoridades.
La cadena británica criticó inmediatamente después la decisión de las autoridades, que llega tras cerca de un año de suspensión de sus emisiones, y manifestó que supone "un duro golpe contra la libertad de prensa".
"Creemos que es fundamental para la gente de todo el mundo tener acceso a un periodismo imparcial, preciso e independiente, incluidos los 1,3 millones de burundeses que recurren habitualmente a BBC News", resaltó.
El propio Baunkumukunzi acusó recientemente a BBC y Voice of America de "recaer en el mismo modelo de terror" y dijo que la emisora estadounidense "ha seguido dando trabajo a un periodista buscado por la Justicia".
La tensión ha aumentado en el país desde 2015, cuando el presidente, Pierre Nkurunziza, anunció su controvertida decisión de seguir al frente del país durante un tercer mandato, lo que la oposición tildó de inconstitucional.
La oposición aseguró que su reelección violaba los términos del acuerdo de paz que se firmó en 2005 tras doce años de guerra civil. Este acuerdo de paz incluía reformas en el Ejército, que fue absorbido por los rebeldes, de mayoría hutu, y que había sido dirigido por la minoría tutsi.