Actualizado: martes, 28 febrero 2017 4:23


MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -

El representante de Estados Unidos para Corea del Norte, Joseph Yun; el director general del Departamento de Asuntos de Asia y Oceanía del Ministerio de Exteriores de Japón, Kenji Kanasugi; y el representante especial surcoreano para la Paz y la Seguridad de la Península de Corea, Kim Hong Kyun, han subrayado este lunes la necesidad de que se impongan "potentes medidas de presión internacional" sobre Corea del Norte.

En el segundo encuentro trilateral que tiene lugar desde que Donald Trump accedió a la Presidencia de Estados Unidos el pasado 20 de enero, Washington, Tokio y Seúl se han reunido en Washington, desde donde han expresado su visión conjunta acerca de la amenaza que supone el programa nuclear y balístico de Pyongyang a las tres naciones.

En un comunicado, los tres han señalado que las "flagrante indiferencia" que muestra Corea del Norte hacia las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que prohíben sus programas "exige una presión internacional potente sobre el régimen".

Las declaraciones de los tres países llegan horas después de que la Unión Europea aprobara la imposición de las nuevas sanciones contra la República Democrática Popular de Corea (RDPC) --Corea del Norte-- impuestas por la resolución 2321 del Consejo de Seguridad de la ONU en noviembre de 2016 en respuesta a su quinta prueba nuclear el pasado 9 de septiembre.

Estados Unidos, Japón y Corea del Sur han considerado, además, "otras posibles medidas", entre ellas, medios para restringir aún más las fuentes de ingresos para los programas armamentísticos norcoreanos.

Por último, han expresado su compromiso a reforzar la cooperación en materia de seguridad entre los tres países como respuesta a la amenaza de Pyongyang, a mantener el régimen global de no proliferación y a dirigir la respuesta internacional ante cualquier otra violación por parte de Corea del Norte.

El encuentro en Washington tiene lugar apenas una semana y media después de que se celebrara el primer encuentro trilateral desde la llegada de Trump a la Casa Blanca, cuando representantes de las tres naciones se encontraron en Bonn, en Alemania, en la víspera de un encuentro de los Gobiernos que se oponen a la continuidad de Bashar al Assad como presidente de Siria.

Ya entonces amenazaron los tres con impulsar una respuesta a nivel internacional "más potente" que las que se han impuesto hasta ahora en caso de que Corea del Norte siga violando las resoluciones de Naciones Unidas.

Corea del Norte justifica su escalada nuclear y militar por la necesidad de defenderse de lo que considera movimientos provocadores de Corea del Sur y Estados Unidos.

Las dos Coreas siguen técnicamente en guerra porque solamente firmaron un armisticio para cesar indefinidamente las hostilidades después de enfrentarse entre 1950 y 1953.

Más noticias