MADRID 30 May. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Estados Unidos se ha mostrado "desconsolado" por el deslizamiento de tierra que ha dejado cientos de muertos y miles de personas sepultadas en la provincia de Enga, en el centro de Papúa Nueva Guinea.
"Estamos desconsolados por la pérdida de vidas y la devastación causada por el deslizamietno de tierra en la provincia de Enga. Estados Unidos está coordinando estrechamente con el Gobierno papú, así como con aliados y socios, para ayudar en los esfuerzos de socorro en casos de desastre", ha declarado el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller.
Las autoridades ordenaron la evacuación de miles de personas cercanas al lugar donde tuvo lugar el deslizamiento, en medio de temores de que pueda ocurrir un segundo corrimiento. La ONU advirtió sobre un brote de enfermedades en el lugar, ya que después de cinco días hay cuerpos atrapados bajo los escombros cerca de corrientes de agua potable.
Los primeros equipos de rescate internacionales, desde Australia, ya han llegado al archipiélago, donde han prometido suministros para los desplazados por el desastre. Naciones Unidas estimó en 670 los muertos y el Gobierno de Papúa Nueva Guinea cifró en 2.000 las personas sepultadas, mientras que advirtió de que las rocas siguen desplazándose, lo que supone un riesgo para los supervivientes y los servicios de rescate, que se han topado con serias dificultades para acceder a la zona afectada.