GINEBRA, 6 Jun. (Reuters/EP) -
La embajadora de Estados Unidos en Naciones Unidas, Nikke Haley, ha reclamado este martes ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas que se celebren "elecciones libres" en Venezuela para superar "una crisis política, económica y humanitaria" suscitada por el Gobierno de Nicolás Maduro que, según ha denunciado, podría acabar con la democracia en la nación caribeña.
"Esta es una crisis política, económica y humanitaria que requiere la atención mundial", ha dicho Haley en un foro con activistas venezolanos y expertos que Estados Unidos ha organizado en Ginebra en los márgenes de la reunión del Consejo de Derechos Humanos.
Para Haley, "el Gobierno venezolano está a punto de destruir los Derechos Humanos y la democracia en Venezuela" con su "campaña de violencia e intimidación contra manifestantes desarmados, empresarios, la sociedad civil y opositores políticos elegidos libremente".
"El régimen venezolano ya no engaña a nadie. Reconociendo que su control del poder se ha reducido, ahora está intentando cambiar las reglas del juego" a través de una Asamblea Constituyente con la que elaborar una nueva Carta Magna, ha alertado.
"Hay muchas cosas que se pueden hacer para ayudar al pueblo de Venezuela, pero realmente solo necesitan una: elecciones libres", ha afirmado Haley, recogiendo así los llamamientos de la oposición, que el año pasado intentó adelantar los comicios presidenciales, previstos para 2019, aunque sin éxito.
CRISIS VENEZOLANA
La tensión política en Venezuela alcanzó un nuevo pico el pasado marzo, cuando el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) despojó de sus poderes a la Asamblea Nacional --controlada por la oposición desde 2016-- y dejó sin inmunidad parlamentaria a los diputados.
El Gobierno de Maduro ordenó dar marcha atrás en ambas decisiones, algo que el TSJ cumplió, pero la oposición y la Organización de Estados Americanos (OEA) consideran que se ha producido una "ruptura del orden constitucional" que requiere elecciones anticipadas.
Desde entonces, la Mesa de Unidad Democrática (MUD) no ha dejado de convocar manifestaciones multitudinarias que han acabado en duros enfrentamientos con las fuerzas de seguridad. Hasta ahora, más de 60 personas han muerto, incluidos adolescentes, y miles han sido detenidas.
Maduro ha convocado una Asamblea Constituyente por considerar que es la única forma de devolver la paz a Venezuela. La MUD, por su parte, ha denunciado que de esta manera el 'chavismo' pretende consumar el "autogolpe" que comenzó con las polémicas sentencias del TSJ.
La Asamblea Constituyente estará formada por 500 "ciudadanos" que serán elegidos en las próximas semanas "a través del voto universal, directo y secreto", de los cuales la mitad, 250, saldrán de sectores de marcado corte oficialista, según ha detallado Maduro.