GINEBRA, 6 Jun. (Reuters/EP) -
La embajadora de Estados Unidos en Naciones Unidas, Nikki Haley, ha pedido este martes ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas que se elimine lo que ha calificado como una "crónica tendencia contra Israel".
"Estados Unidos está revisando este Consejo cuidadosamente y nuestra participación en el mismo. Vemos algunas áreas que hay que fortalecer significativamente", ha señalado Haley en un foro celebrado en Ginebra.
El Consejo ha tomado una firme posición contra la ocupación de Israel, su trato a los palestinos y la construcción de asentamientos judíos. Esta postura crítica con el Estado hebreo ha sido en reiteradas ocasiones un asunto polémico para Estados Unidos, el principal aliado de Israel.
"Estados Unidos no trata de abandonar el Consejo de Derechos Humanos. Buscamos restablecer la legitimidad del Consejo", ha asegurado la embajadora estadounidense.
Haley también ha reclamado que se celebren "elecciones libres" en Venezuela para superar "una crisis política, económica y humanitaria" suscitada por el Gobierno de Nicolás Maduro que, según ha comunicado, podría acabar con la democracia en la nación caribeña.
Algunos activistas han pedido a Washington que se centre en los problemas del propio país. "Es difícil tomar seriamente a la embajadora Haley sobre el apoyo estadounidense a los Derechos Humanos tras ver las acciones de la Administración de Donald Trump, como la prohibición de la inmigración y la represión de los musulmanes", ha dicho el director de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU), Jamil Dakwar. "Estados Unidos debe poner orden en casa y hacer que los Derechos Humanos sean una prioridad en el país", ha añadido.