WASHINGTON 10 Ene. (Reuters/EP) -
La Casa Blanca ha mostrado este viernes de nuevo su preocupación ante la liberación por parte de Afganistán de 72 presos que Estados Unidos considera "peligrosos criminales" y ha indicado que la cuestión ha sido discutida con las autoridades afganas.
"Estamos muy preocupados por la liberación de cualquier detenido que pueda suponer una amenaza a las fuerzas de seguridad estadounidenses, y esta es una cuestión que nos tomamos muy en serio", ha asegurado el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.
Las autoridades afganas tenían previsto excarcelar a 88 presos y, tras las críticas de Washington, decidió revisar todos los casos. Sin embargo, el Gobierno de Hamid Karzai considera que no hay pruebas contra 45 de los prisioneros, mientras que las que existen contra otros 27 no son suficientes para someterles a juicio.
Por este motivo, únicamente juzgará a 12 de los detenidos, lo cual representa un motivo de preocupación para Estados Unidos. Las 72 personas que quedarán en libertad "son peligrosos criminales sobre los que existen pruebas que les vinculan con crímenes terroristas", según afirmó la portavoz del Departamento de Estado norteamericano, Jen Psaki.
Entre los actos que habrían cometido estos presos figuran "el uso de artefactos explosivos improvisados", el "mayor asesino de civiles afganos", criticó Psaki.
El gesto aumentará la tensa relación entre los dos países que ya estuvo a punto de romperse ante la negativa del presidente Karzai a firmar el acuerdo de seguridad que regulará la presencia militar estadounidense tras la retirada del grueso de las tropas internacionales este año. Sin este acuerdo, Washington retiraría a casi todos sus efectivos.