MADRID 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
El embajador de Estados Unidos en Turquía, John Bass, ha indicado este lunes que la duración de la suspensión de la gestión de solicitudes de visados para no inmigrantes en el país dependerá de las conversaciones entre ambos países sobre la detención del empleado del consulado estadounidense en Estambul Metin Topuz.
"Esta decisión no la hemos tomado de manera ligera. Es una decisión que ha sido tomada con mucha tristeza. Nos damos cuenta de que la suspensión de las solicitudes de visados perjudicará a la gente", ha aseverado Bass en relación al arresto de Topuz, que se encuentra bajo custodia policial por presunta vinculación al terrorismo.
"Esperamos que no se alargue mucho, pero ahora mismo no podemos predecir cuánto tiempo requerirá resolver esta cuestión", ha señalado en un comunicado.
Bass, que ha indicado que la suspensión del servicio de visados permite minimizar el número de visitantes a la Embajada y los consulados mientras se evalúa el compromiso por parte del Gobierno turco de proteger las instalaciones diplomáticas y a su personal, ha manifestado que "a pesar de los esfuerzos realizados, aún no han podido determinar el motivo del arresto" de Topuz.
"Tampoco sabemos qué pruebas existen al respecto. (...) Además, no se le ha permitido acceder debidamente a su equipo legal. Es particularmente molesto que las autoridades hayan informado sobre el asunto a algunos medios", ha afirmado.
"Los medios han alegado en repetidas ocasiones que el empleado del Consulado habló con miembros del Gobierno, las fuerzas de seguridad y la Fiscalía sobre asuntos legales. Seré claro: reforzar la cooperación y la legalidad entre Estados Unidos y Turquía formaba parte del empleado", ha aseverado Bass.
El embajador ha insistido en que "hablar y viajar con la Policía turca formaba parte de su trabajo" y ha indicado que, además, el Gobierno no ha facilitado ninguna información que revele que el diplomático había incurrido en algún delito o irregularidad.
Bass a resaltado que no se trata de un "veto contra la población turca" y ha aseverado que espera que "se tenga en cuenta la presunción de inocencia" de Topuz "tal y como sucede en todas las democracias modernas".
Topuz, detenido el 4 de octubre, está acusado de mantener lazos con el influyente clérigo Fetulá Gulen, que reside en Pensilvania y ha sido acusado en reiteradas ocasiones de haber orquestado el intento de golpe de Estado que tuvo lugar en julio de 2016.
RESPUESTA TURCA
En respuesta a la suspensión de las nuevas solicitudes de visados, la Embajada de Turquía en Washington ha señalado que "los acontecimientos recientes han forzado al Gobierno de Turquía a reevaluar el compromiso del Gobierno de Estados Unidos con la seguridad de las instalaciones y el personal de la misión turca".
De la misma manera en que los diplomáticos estadounidenses anunciaron la congelación de la emisión de visados, la Embajada turca ha señalado que "para minimizar el número de visitantes a nuestra Embajada y consulados mientras se lleva a cabo la reevaluación, se han suspendido con efecto inmediato los servicios de visado para no inmigrantes en todas las instalaciones diplomáticas turcas en Estados Unidos".
El Ministerio de Asuntos Exteriores turco ha convocado a los representantes estadounidenses para pedir que se anulara la suspensión con el argumento de que está provocando "tensiones innecesarias".
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha calificado de "molesta" la medida estadounidense. "Por encima de todo, la decisión es muy molesta. Que la Embajada en Ankara adopte esa decisión y la aplique es molesto", ha afirmado Erdogan en rueda de prensa durante su visita a Ucrania.