CAIRO 12 Sep. (Reuters/EP) -
El embajador de Egipto ante la ONU, Amr Ramadan, ha criticado este martes al Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Hussein, por sus denuncias de la violencia sistemática en el país, argumentando que se basan en una "lógica errónea", según ha informado la agencia de noticias estatal MENA.
En la sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU celebrada el lunes en Ginebra, Al Hussein dijo que el Estado de emergencia declarado por el Gobierno egipcio en abril ha sido utilizado para justificar el "silenciamiento sistemático que se está realizando sobre la sociedad civil".
En su intervención citó informes que mostraban arrestos, detenciones arbitrarias, listas negras, prohibiciones de viajes, congelación de activos, intimidación y otras formas de represión impuestas por las autoridades de Egipto contra defensores de los Derechos Humanos, periodistas, disidentes políticos y miembros de Hermanos Musulmanes.
El embajador egipcio advirtió a Al Hussein de que su oficina se ha convertido en un "portavoz de las agencias que le pagan y que cuenta con intereses políticos y económicos". Ramadan ha negado las acusaciones.
El Gobierno de Egipto ya fue objeto la semana pasada de un informe de Human Rights Watch en el que se aseguraba que las autoridades torturaban de forma sistemática a presos en las cárceles del país, lo que provocó que se prohibiese el acceso a la página web de la ONG.
La Comisión de Derechos Humanos del Parlamento en Egipto, que fue muy crítica con el reportaje, también ha desarrollado un plan de acción como respuesta a la ONG, que incluye reuniones con varios diplomáticos extranjeros dentro y fuera de Egipto para explicar los esfuerzos que realizan las autoridades del país para defender los Derechos Humanos, según ha informado MENA.