El traspaso de la base marca el fin de la presidencia de unidades de la fuerza 'Barkhane' en el norte de Malí
MADRID, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las tropas francesas se retiraron el martes de la ciudad maliense de Tombuctú, situada en el norte del país, cerca de nueve años después de su despliegue para apoyar la ofensiva del Ejército del país africano contra los yihadistas que se habían hecho con el control de la localidad.
El Gobierno francés ha señalado que "continúa la adaptación del dispositivo militar francés desplegado en la franja sahelo-sahariana, puesto en marcha en julio de 2021 por el presidente (de Francia, Emmanuel Macron) y sus homólogos del G5 Sahel --integrado por Burkina Faso, Chad, Malí, Mauritania y Níger--".
"Tras las instalaciones en Kidal y Tessalit, las instalaciones ocupadas por la fuerza 'Barkhane' en Tombuctú fueron transferidas el 14 de diciembre a las Fuerzas Armadas malienses", ha señalado en un comunicado, en el que ha destacado que esta entrega "ha sido progresiva y ha estado coordinada" con el Ejército del país africano y la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de Naciones Unidas en Malí (MINUSMA).
De esta forma, ha argumentado que "esta transferencia se enmarca en la asociación de combate que une a las fuerzas francesas y malienses" y ha detallado que "elementos" del Destacamento del Aire de Tombuctú (DAT) se instalaron en el lugar el 9 de diciembre para el proceso de instrucción.
"Como en Kidal y Tessalit, esta nueva etapa en la adaptación del dispositivo militar francés en la franja sahelo-sahariana se ha llevado a cabo en muy buenas condiciones de diálogo con las fuerzas asociadas. No se han encontrado dificultades particulares. Marca el fin de la presidencia de unidades de la fuerza 'Barkhane' en el norte de Malí", ha manifestado.
Por otra parte, ha reiterado su "compromiso" con la lucha contra el terrorismo en el país africano y la región y ha hecho hincapié en que "los resultados obtenidos desde 2013 son reales", antes de subrayar que "la actuación del Ejército francés ha permitido evitar el colapso de Malí y la creación de zonas seguras para los terroristas, en particular Estado Islámico en Gran Sáhara (ISGS) en la zona de las tres fronteras --con Níger y Burkina Faso--".
"El nuevo dispositivo militar francés sigue estructurado en torno a dos ejes: la lucha contra los grupos armados terroristas y el aumento de las capacidades de los ejércitos asociados", ha explicado, al tiempo que ha incidido en su objetivo de "ayudar a los socios sahelianos a hacer frente a una amenaza que busca extenderse del Sahel hacia el sur y los países del golfo de Guinea".
Por ello, ha recalcado que "Francia seguirá llevando a cabo operaciones contra altos cargos de Al Qaeda e ISGS", al tiempo que ha señalado que mantendrá operaciones de cooperación, asociación de combate con la operación 'Takuba' e "intervenciones rápidas en beneficio de fuerzas aliadas o socios, principalmente con medios aéreos".
París anunció el pasado mes de julio una reorganización de la presencia militar en la región de Sahel que empezará por cerrar las bases en el norte de Malí a finales del presente 2021, mientras que el país mantendrá "entre 2.500 y 3.000 hombres" de los 5.100 que hay desplegados hoy en día.
Tras ello, el primer ministro maliense, Choguel Maiga, lamentó durante su intervención ante la Asamblea General de Naciones Unidas que "los grupos terroristas armados que invadieron casi dos tercios del territorio en 2012 se han dispersado sin llegar a ser eliminados".
Asimismo, el primer ministro acusó a Francia de "abandono", algo rechazado por Macron y por la ministra de Defensa francesa, Florence Parly, quien manifestó que "hay mucha hipocresía, mala fe e indecencia" en dichas palabras. París ha criticado además a Malí por sus supuestos contactos para contratar a mercenarios del Grupo Wagner.
El Grupo Wagner ha enviado mercenarios a varios países de África durante los últimos años --entre ellos Libia y Republica Centroafricana (RCA)--, lo que ha provocado suspicacias entre varios países occidentales, especialmente Estados Unidos y Francia, por la implicación de Moscú en varios conflictos en el continente.