MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Ejército de Siria ha logrado este miércoles dividir en dos la región de Ghuta Oriental, situada en los alrededores de Damasco y controlada por los rebeldes, según ha informado el Observatorio Sirio por los Derechos Humanos.
El organismo, con sede en Londres e informantes en el país árabe, ha indicado que las tropas gubernamentales se han hecho con el control de las localidades de Beit Saua y Al Ashari y han llegado a los alrededores de Madyara y Hamuriya.
Asimismo, las fuerzas del presidente, Bashar al Assad, han logrado alcanzar las afueras de Jesrin y Al Rihan, antes de indicar que de esta forma han conseguido hacerse con el 52 por ciento del territorio de Ghuta Oriental.
Durante la jornada, las fuerzas leales al Gobierno sirio han intensificado sus bombardeos en la localidad de Mesraba, amenazando con dividir Ghuta Oriental y aislar aún más a la población local.
El coordinador humanitario de la ONU en Siria, Alí al Zaatari, ha pedido por carta al viceministro de Exteriores, Faisal Mekdad, que el Gobierno acate un alto el fuego el jueves para permitir la entrada de un segundo convoy, según una copia del texto al que ha tenido acceso Reuters.
Al Zaatari ha recordado también los problemas sufridos por el anterior envío y ha denunciado registros tanto de los vehículos como de los efectos personales de los trabajadores, así como los problemas de seguridad. Una fuente diplomática ha advertido de que "había 83 cooperantes a bordo".
El Observatorio calcula que unos 800 civiles han perdido la vida desde el inicio de los bombardeos, que han proseguido pese a que el Consejo de Seguridad de la ONU reclamó en una resolución una tregua de días en todo el país.
Damasco y Moscú alegan que sus objetivos en el caso de Ghuta Oriental son grupos terroristas, un argumento que ha puesto en duda el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Hussein.
La derrota en Ghuta supondría para los rebeldes el mayor golpe militar desde que perdieron la zona este de Alepo a finales de 2016. Entonces, el régimen también empleó una táctica similar de asedio, ataques aéreos y asaltos terrestres para salirse con la suya, a costa de llevar al límite a decenas de miles de personas.