MOSCÚ, 6 May. (EUROPA PRESS) -
El Ejército sirio ha negado este viernes está detrás del bombardeo aéreo registrado el jueves en un campamento de desplazados internos en el norte de Siria en el que murieron al menos una treintena de personas.
Una fuente militar siria ha asegurado a la agencia rusa RIA Novosti que los aviones de la Fuerza Aérea siria y la artillería no atacaron el campamento de Kourmani, en la provincia de Idlib, y ha sostenido que dichas acusaciones carecen de fundamento.
"El Ejército de Siria no asestó ningún golpe contra el campamento de refugiados de Idlib", ha señalado la fuente militar, subrayando que "ni la aviación ni la artillería han operado en esa zona desde hace aproximadamente una semana". "Las acusaciones contra el Ejército sirio carecen de fundamento", ha sostenido.
Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, al menos 28 personas murieron en el bombardeo del campo de desplazados, situado a 4 kilómetros de Samarda y a 30 de Alepo. La Defensa Civil de Siria, el grupo de rescate más conocido como 'cascos blancos', ha informado de 30 fallecidos, mientras que otras fuentes han elevado el balance hasta los 50.
"Hubo dos bombardeos aéreos que golpearon este campamento improvisado para desplazados que se habían refugiado de los combates en el sur de Alepo y Palmira", ha explicado a Reuters Abu Ibrahim al Sarmadi, un activista de la cercana localidad de Atmeh, que habló con personas del campamento.
Nidal Abdul Qader, un responsable de asistencia que reside a un kilómetro del campamento, ha precisado que unas 50 tiendas de campaña y una escuela han quedado quemadas tras el bombardeo.