BEIRUT, 8 Oct. (Reuters/EP) -
El Ejército turco se está enfrentando contra el grupo yihadista Tahrir al Sham -- integrado en su mayor parte por miembros del antiguo grupo terrorista Frente al Nusra -- cerca de la localidad de Kafr Lusin, en la frontera siria, después de que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, anunciara ayer el comienzo de una gran ofensiva en la zona.
Esta operación pretende asegurar la frontera turca y arrebatar el control de la zona a la organización, que se hizo con la región el pasado 23 de julio y supone junto a Estado Islámico la alianza yihadista más fuerte de Siria.
"Ahora mismo está sucediendo una importante operación en Idlib. Una operación que va a continuar en cuanto nos fijemos nuevos objetivos. No podemos dejar abandonados a nuestros hermanos. No podemos decirles que no nos importa si mueren. Tenemos que ayudar y no vamos a permitir que se forme un corredor terrorista a través de nuestra frontera", ha afirmado Erdogan en una comparecencia pública recogida por la cadena NTV.
La operación contará con el respaldo de las fuerzas del Ejército turco, que todavía no han llegado a la localidad, según Erdogan, y con apoyo aéreo ruso. Por el momento y hasta la llegada de las tropas, el Ejército de Turquía proporcionará apoyo de artillería desde la cercana frontera.
APOYO INTERNACIONAL
"Rusia está apoyando la operación desde el aire, y nuestras fuerzas armadas desde el interior de las fronteras de Turquía", ha afirmado Erdogan, aunque Mustafa Sejari, alto cargo del grupo rebelde sirio Liwa al Mutasem, ha asegurado que Rusia no colaborará con los rebeldes en la operación. "El papel de los rusos se limita a las áreas bajo el control del régimen", ha asegurado.
"El Ejército Libre Sirio con el apoyo de las tropas turcas está en plena disposición para entrar en la zona, pero hasta este momento no hay movimiento", ha aseverado Sejari.
La incursión se está llevando a cabo después de que Irán y Rusia, que apoyan al presidente sirio Bashar al Assad, y Turquía, que apoya a los rebeldes, acordaran el mes pasado reducir los combates entre insurgentes y el Gobierno en el noroeste.
El antiguo Frente Al Nusra rompió su vinculación con Al Qaeda el año pasado. Desde principios de este año ha luchado contra otros grupos rebeldes en Idlib y otras partes de Siria, mientras el Gobierno se ha centrado principalmente en la guerra contra Estado Islámico en el este.
La alianza Tahrir al Sham está bien arraigada en la zona fronteriza de Idlib y mantiene una gran presencia militar en las ciudades cercanas. Precisamente tras el anuncio de la ofensiva, Tahrir al Sham ha advertido de que la ofensiva "no será un picnic".
"Los leones de la yihad y el martirio esperan para saltar sobre ellos", ha apuntado en un comunicado publicado en redes sociales en el que denuncian la "traición" de las milicias del ELS por colaborar con Rusia y el Gobierno, aunque no mencionan a Turquía.