MADRID, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Embajada de España en Mauritania "no tiene constancia" de que haya españoles en peligro tras el golpe de Estado perpetrado hoy por la Guardia Presidencial y el Ejército, informó hoy a Europa Press un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.
Según la misma fuente, la situación en Nouakchott es de una relativa normalidad y no se oyen disparos en las calles. La legación española ha comenzado a contactar con la colonia española en el país, compuesta de unas 150 personas --en su mayoría cooperantes y religiosos residentes en la capital-- y de momento no ha constatado que haya nadie en peligro.
La Embajada mantiene puntualmente informado de la evolución de la situación al ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, quien ya se encuentra en Beijing como cabeza de la delegación política que representará a España en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos.
Por otra parte, el Ministerio español del Interior se ha puesto en contacto con el contingente de guardias civiles destinados en Nuadibú (norte del país), segunda ciudad en importancia de Mauritania, y ha constatado "normalidad" en su situación, informaron a Europa Press fuentes del departamento que dirige Alfredo Pérez Rubalcaba.
En todo caso, Interior mantiene abierta una línea permanente de contacto con el contingente de Guardia Civil, la Embajada en Nouakchott y el Ministerio de Asuntos Exteriores, precisaron las fuentes consultadas. De la seguridad de la Embajada, que por el momento no se ha visto afectada por el golpe de Estado, se encarga un grupo de agentes del Cuerpo Nacional de Policía.
En estos momentos hay destacados en Nuadibú alrededor de 25 agentes del Instituto Armado en funciones de vigilancia de las costas mauritanas para prevenir la salida de cayucos. La mayoría prestan servicio a bordo de la Patrullera Río Duero y un grupo más reducido lo hacen pilotando un helicóptero que sobrevuela la zona para divisar las embarcaciones que ponen rumbo a Canarias.