El embajador ruso en Belgrado advierte de que la situación en Kosovo es "muy peligrosa"

Efectivos de la fuerza de la OTAN en Kosovo
Efectivos de la fuerza de la OTAN en Kosovo - KFOR / FACEBOOK
Publicado: martes, 27 diciembre 2022 17:20


MADRID, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -

El embajador ruso en Belgrado, Alexander Botsan-Jarchenko, ha advertido este martes de que la situación de tensión entre Serbia y Kosovo se está desarrollando y avanzando hacia un escenario "muy peligroso".

Según ha detallado el representante diplomático ruso, la situación "se está calentando", especialmente en el norte de Kosovo, y ha alertado de que en cualquier momento se puede dar "cualquier provocación".

"Pristina está aumentando su presencia militar", ha reprochado Botsan-Jarchenko en una entrevista para la cadena de televisión Zvezda, recogida por TASS, y en la que ha acusado a las autoridades kosovares de tratar controlar las zonas de población serbia.

Así pues, Botsan-Jarchenko ha alertado de que Pristina está cumpliendo con la misión ordenada por Occidente de "poner bajo control las áreas pobladas por serbios en Kosovo".

Un grupo de serbios ha bloqueado desde este martes por la mañana una carretera en la ciudad de Mitrovica, en el norte de Kosovo, en el marco de la escalada de tensiones que protagoniza el territorio balcánico desde hace semanas.

Este bloqueo se da además un día después de que la Misión de la Alianza Atlántica en Kosovo (KFOR) anunciara la puesta en marcha de una investigación por un tiroteo sin heridos en la localidad de Zubin Potok.

El presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, ordenó al Ejército el lunes por la noche estar en "el más alto nivel de preparación para el combate". Horas antes, el mandatario serbio ya había afirmado que su Gobierno tomaría "medidas para proteger" a los serbios.

Serbia pidió a mediados de diciembre a la OTAN desplegar 1.000 efectivos de seguridad serbios en Kosovo, una solicitud sin precedentes, amparándose en una resolución de Naciones Unidas, y sobre la que el propio Vucic adelantó que no preveía el visto bueno de la Alianza Atlántica.

Rusia ha apoyado a Serbia en sus reivindicaciones respecto a Pristina y de hecho no reconoce la independencia de Kosovo, antiguo territorio serbio.

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