MADRID, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha abogado por una "nueva etapa" en la relación con Arabia Saudí tras la primera visita que ha realizado al país árabe este jueves desde el asesinato en octubre de 2018 del periodista Yamal Jashogi en el interior del consulado saudí en Estambul.
"Como dos países hermanos con relaciones históricas, culturales y humanas, estamos haciendo esfuerzos incansables para fortalecer todo tipo de relaciones políticas, militares y económicas, y para iniciar una nueva era entre nosotros", ha declarado Erdogan en su cuenta de Twitter.
Erdogan ha mantenido una reunión con el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salman en el palacio real Al Salman en Yeda, la segunda ciudad más grande del país, en la que han hablado sobre las relaciones saudíes y turcas y a las posibilidades de desarrollarlas en diversos ámbitos y de los últimos acontecimientos regionales e internacionales, según ha informado la agencia oficial de noticias del reino árabe SPA.
Así, Erdogan ha hecho hincapié en la importancia de la seguridad y estabilidad en la región del golfo Pérsico.
"Expresamos en cada ocasión que damos tanta importancia a la estabilidad y seguridad de nuestros hermanos de la región del golfo como a la nuestra", ha dicho, agregando que está "en contra de todas las formas de terrorismo".
El presidente de Turquía ha sentenciado que ha realizado su visita en el mes sagrado de Ramadán porque es cuando "la misericordia, el perdón y la compasión del señor envuelven los corazones y abrirá las puertas de una nueva era con nuestro amigo y hermano Arabia Saudí".
Los gobiernos de Turquía y Arabia Saudí han intentado acercar posturas durante los últimos meses tras años de tensión, acentuadas con el asesinato de Jashogi. Así, Erdogan abordó en abril y mayo de 2021 las relaciones en sendas conversaciones con el rey Salmán de Arabia Saudí.
Jashogi, columnista del diario 'The Washington Post', acudió el 2 de octubre de 2018 al consulado saudí en Estambul a recoger unos papeles para poder casarse con su prometida, Hatice Cengiz.
Sin embargo nunca más se supo de él, sus restos no han sido encontrados y los servicios de inteligencia turcos y occidentales apuntan a que la orden de matarlo solo podría provenir de las más altas esferas del reino saudí.
Turquía se ha mostrado desde entonces muy crítico con las autoridades saudíes por lo sucedido y la Fiscalía turca ha pedido cadena perpetua para 26 acusados, al tiempo que ha reclamado a Riad su extradición. Sin embargo, Arabia Saudí se ha negado defendiendo sus propios procesos de rendición de cuentas.
El proceso judicial en Arabia Saudí concluyó en septiembre de 2020 cuando, tras el proceso de apelaciones, fueron condenadas a penas de cárcel ocho personas, reduciendo así la pena de muerte dictada en diciembre de 2019 contra cinco de ellas.