ESTAMBUL, 18 Mar. (Reuters/EP) -
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha lanzado este viernes un contundente mensaje a la comunidad europea, a la que ha acusado de "bailar en un campo de minas" al proporcionar apoyo a los kurdos, y a la que ha exigido que "se mire a sí misma" antes de imponer una postura sobre la migración al Gobierno de Ankara.
"En un momento en el que Turquía alberga a tres millones de refugiados, aquellos que son incapces de encontrar un espacio siquiera para unos pocos, aquellos que están obligando a esos inocentes a vivir en condiciones vergonzosas, son los que primero deberían mirarse a sí mismos", acusó el presidente turco.
Erdogan aprovechó para repudiar las críticas de algunos líderes europeos al elevado número de víctimas colaterales que está arrojando la campaña de Ankara contra las milicias del Partido de los Trabajadores del Kurdistán. El presidente turco criticó lo que percibe como un apoyo tácito de la Unión Europea al grupo armado, al que su Gobierno cataloga como organización terrorista.
"Nuestra lucha contra el terrorismo es mesurada y legítima. Hay que tener en cuenta que todas las organizaciones terroristas regionales se han unido contra Turquía", ha explicado el presidente turco. "Por contra, muchos estados, en particular los occidentales, siguen sin adoptar una postura conjunta", ha lamentado.