"Cuando pasa algo en Bélgica o en París, cuando mueren cinco o seis personas, todos se unen", ha afirmado
MADRID, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha recriminado a la Alta Representante de Política Exterior de la UE, Federica Mogherini, que no haya viajado a Turquía tras la intentona golpista del 15 de julio y se ha preguntado que habría hecho en caso de que un incidente así hubiese tenido lugar en otro país.
Erdogan ha reconocido en una entrevista en la televisión italiana que no le gustó que Mogherini reclamase "respeto por la democracia, los Derechos Humanos y las libertades fundamentales" tras la asonada, en alusión a las masivas detenciones que estaban empezando a llevar a cabo las autoridades.
"Mogherini debería haber venido en primer lugar a Turquía", ha lamentado Erdogan, que se ha preguntado si su reacción habría sido la misma "si el Parlamento italiano hubiese sido bombardeado". "Cuando pasa algo en Bélgica o en París, cuando mueren cinco o seis personas, todos se unen", ha subrayado.
Erdogan ha insistido en que Turquía ha sufrido "un golpe contra la democracia" que concluyó con 238 "mártires". "Desafortunadamente, nadie de Europa, de la UE o del Consejo Europeo ha venido", ha lamentado, según la agencia de noticias oficial Anatolia.
El mandatario turco ha defendido la respuesta de su Gobierno, tanto la purga de supuestos simpatizantes del golpe en diferentes instituciones públicas y privadas como las iniciativas que podría adoptar en el futuro para endurecer los castigos, entre ellas la pena de muerte.
Erdogan ha asegurado que tres de cada cuatro ciudadanos turcos son partidarios de recuperar la pena capital y ha argumentado que "sólo los países de la UE no la tienen". En este sentido, ha recordado que países como Estados Unidos, Japón, China o Arabia Saudí tienen en su Código Penal este tipo de condenas.
GULEN
Erdogan ha llamado a extirpar de todos los estamentos del Estado "los virus" que han surgido bajo la batuta del clérigo Fetulá Gulen, exiliado en Estados Unidos y señalado por Ankara como presunto 'cerebro' del fallido golpe de Estado".
El presidente también se ha referido a Gulen en un acto del Consejo de Religión en el que incluso ha pedido perdón por haber ayudado en el pasado a la organización liderada por su otrora aliado. "Ayudamos a esta estructura con buena voluntad", ha admitido, al mencionar los inicios de dicha organización.
"A pesar de nuestras reservas hacia el líder, mostré tolerancia por respeto a sus actividades educativas, de ayuda y solidarias, tanto en el país como en el extranjero. Fui tolerante porque decían 'Dios'. Teníamos algo en común", ha explicado, según el periódico 'Hurriyet'.
Ahora, sin embargo, Erdogan no sólo niega cualquier lazo con Gulen sino que pide abiertamente su procesamiento. El Gobierno turco ha presentado una petición de extradición al de Estados Unidos, que se ha comprometido a estudiar la solicitud sin avanzar ningún calendario para dar una posible respuesta.