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Acusa a los países occidentales por no criticar a "los asesinos de niños" y no pedir un alto el fuego
MADRID, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha criticado este jueves el "fanatismo" del Gobierno de Israel en su ofensiva contra la Franja de Gaza y ha cargado contra los países occidentales por "no criticar a los asesinos de niños", en el marco de las hostilidades desatadas por los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
"Hacemos frente a un fanatismo (en el seno de las autoridades israelíes) que legitima el asesinato de niños", ha dicho, antes de acusar al Ejército de Israel de "seguir bombardeando escuelas, mezquitas, iglesias, hospitales, universidades y edificios civiles, violando todo lo que tiene valor".
"El 73 por ciento de los cerca de 11.000 gazatíes asesinados brutalmente por Israel son mujeres y niños. Las autoridades israelíes, que cuentan con el apoyo total de los países occidentales, no saben lo que es la humanidad", ha denunciado.
Así, ha criticado a los países occidentales por su apoyo a Israel y ha dicho que "están tan indefensos que ni siquiera pueden pedir un alto el fuego". "Los que miran hacia otro lado mientras queman nuestro libro sagrado, el Corán, bajo la excusa de la libertad de expresión, no pueden siquiera tolerar la bandera palestina", ha dicho.
"Es posible seguir poniendo ejemplos de esta hipocresía", ha manifestado Erdogan, que ha pedido "fortalecer la unidad" entre los países musulmanes y ha incidido en que Turquía "continúa con sus iniciativas diplomáticas para lograr un alto el fuego humanitario y evitar la propagación del conflicto", según ha informado la agencia estatal turca de noticias, Anatolia.
El Ejército de Israel lanzó la ofensiva tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por Hamás, que dejaron cerca de 1.400 muertos y más de 240 secuestrados. Las autoridades de Gaza han señalado que los ataques israelíes se han saldado hasta ahora con más de 10.500 muertos, entre ellos más de 4.300 niños, mientras que más de 160 palestinos han muerto a manos de las fuerzas israelíes o en ataques perpetrados por colonos en Cisjordania y Jerusalén Este.