El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, durante una reunión con su homólogo de Rusia, Vladimir Putin (archivo) - Europa Press/Contacto/Gavriil Grigorov/Kremlin Poo
MADRID, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha reclamado este viernes a los países occidentales que "presionen" al Gobierno de Israel para que acepte la última propuesta para un acuerdo del alto el fuego con el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) en la Franja de Gaza, tras cerca de nueve meses de conflicto.
"Es esencial que los países occidentales presionen a Israel. Creo que, como resultado de esta presión, se alcanzará un alto el fuego definitivo", ha sostenido Erdogan durante su viaje de vuelta a Turquía desde Kazajistán, donde participó en la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (SCO, según sus siglas en inglés), según ha recogido la agencia estatal turca de noticias, Anatolia.
Así, ha apuntado que las autoridades de Qatar, que están llevando a cabo un papel de mediación, están también "aplicando la presión necesaria a través de diferentes canales" para intentar lograr un alto el fuego. "Esperamos que, si Dios quiere, se logre un alto el fuego definitivo como resultado de la llamada que realizada por el presidente estadounidense (Joe) Biden a Israel y que terminen las masacres cometidas por Israel", ha zanjado.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, autorizó el jueves el envío de un nuevo equipo negociador para abordar con Hamás la posibilidad de un alto el fuego en la Franja de Gaza a cambio de liberación de rehenes. Hamás reclama que Israel ponga fin a su ofensiva y que retire a sus tropas de Gaza, si bien las autoridades israelíes han afirmado que el acuerdo no derivaría en un fin de sus ataques.
La decisión de Netanyahu se produce después de revisar la respuesta de Hamás a la última propuesta de Biden, si bien no se ha dado conocer hasta qué punto se desviaría de este plan basado en tres etapas en el que se contempla un alto el fuego momentáneo como paso previo al fin permanente de las hostilidades, el intercambio de rehenes y la entrega de ayuda humanitaria, así como la reconstrucción de la Franja de Gaza.
El Ejército de Israel desencadenó una cruenta ofensiva contra la Franja tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por Hamás y otras facciones palestinas, que dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 240 secuestrados. Las autoridades de Gaza han denunciado más de 38.000 muertos, a los que se suman más de 550 palestinos muertos en Cisjordania y Jerusalén Este en operaciones por parte de las fuerzas israelíes o en ataques perpetrados por colonos.