MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
España ha propuesto a la UE la adopción de nuevas medidas diplomáticas de presión sobre Honduras con el fin de empujar a las autoridades de facto a que acepten el regreso del depuesto presidente Manuel Zelaya en los términos de la propuesta del presidente costarricense, Oscar Arias, que actúa como mediador.
Así lo ha avanzado el secretario de Estado para Iberoamérica, Juan Pablo de Laiglesia, en una entrevista con Europa Press. "Estamos en contacto con la presidencia de la UE para incrementar la presión diplomática con nuevas medidas sobre Honduras en el supuesto de que las gestiones del presidente Arias no tengan resultado", ha señalado De Laiglesia.
El secretario de Estado ha confiado en que "mañana" mismo se puedan hacer públicas para que "surtan su efecto" antes del plazo fijado por Arias para conseguir que el autoproclamado Gobierno de Roberto Micheletti acepte antes de este miércoles el primer punto de la propuesta, el regreso del depuesto Manuel Zelaya como único presidente constitucional.
De Laiglesia subrayó que estas medidas, que no quiso detallar completamente, "dejarían sin ninguna duda claro que no hay ningún reconocimiento de las autoridades de facto y que no se cuenta con Honduras en ningún proyecto de cooperación ni de negociación de futuro".
Entre otras cosas, el Gobierno español ha propuesto que si Honduras no restablece su normalidad constitucional "no podrá ser parte de ningún acuerdo con la UE", por lo que defiende que las negociaciones para la firma de un acuerdo de asociación entre los Veintisiete y Centroamérica continúen, pero dejando "al margen" a Honduras hasta que no recupere su normalidad institucional.
De Laiglesia expresó su preocupación por que todavía no se haya logrado un arreglo definitivo en Honduras porque "cada día que pasa el Gobierno de facto puede tener la tentación de sentirse consolidado", cuando en realidad lo único que tiene es "el rechazo de toda la comunidad internacional", que exige la reposición de Zelaya en sus funciones y el restablecimiento de la normalidad de la vida institucional en Honduras.
LA VUELTA DE ZELAYA EN SUS FUNCIONES, "IMPRESCINDIBLE"
También advirtió de que el regreso de Zelaya como presidente "es un elemento imprescindible en cualquier solución que se encuentre". "Podrán negociarse otros aspectos pero desde luego el regreso de un presidente que fue ilegítimamente secuestrado y expulsado del país y el restablecimiento de sus funciones constitucionales es un elemento fundamental", subrayó.
Preguntado por un reciente documento de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES) que denuncia que España, EEUU y la UE están desempeñando un papel "meramente subsidiario" de los intereses del presidente venezolano, Hugo Chávez, en Honduras, Dela Iglesia señaló que afirmaciones como ésta demuestran que "ignoran lo que está ocurriendo".
Defendió el papel "activo y coordinado" que ha desempeñado España desde el principio de la crisis, ya que ha estado "en el origen y acompañamiento de todas las medidas que se han adoptado, y que han sido adoptadas por quienes tienen la primera responsabilidad de hacerlo, que son los órganos e instituciones de coordinación americanas".
Remarcó asimismo que España ha actuado y lo seguirá haciendo "en estrecha coordinación con los países latinoamericanos, la Organización de Estados Americanos" y con sus socios europeos "haciendo sentir esa presión diplomática sobre las autoridades de facto de Honduras y apoyando las gestiones del presidente Arias".
Si los Veintisiete aceptan la propuesta de España, será la segunda vez que adopten medidas de presión contra Honduras a instancias de las autoridades españolas, después de que Madrid urgiera a sus socios europeos a llamar a consultas a sus embajadores en Tegucigalpa, lo que hicieron todas aquellas naciones que tenían representación diplomática en el país.