MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
Richard Ratcliffe, esposo de la ciudadana británico-iraní Nazanin Zaghari-Ratcliffe, condenada a cinco años de cárcel en Irán por cargos relacionados con la seguridad, ha asegurado que su mujer se encuentra "al borde de una crisis nerviosa" tras localizar varios bultos en sus senos.
En su comunicado, la familia de Zaghari-Ratcliffe ha afirmado que la mujer "se ha quejado de fuertes dolores punzantes en los senos", tras lo que se le realizó una mamografía en una clínica de la prisión que habría reflejado resultados no concluyentes.
Tras reclamar un segundo diagnóstico, el sábado fue trasladada a una clínica privada en la que se le comunicó que los bultos serían benignos, si bien Ratcliffe ha recalcado que la familia de su esposa tiene un historial de cáncer de mama.
El esposo de Zaghari-Ratcliffe ha resaltado que los médicos le han dado antiinflamatorios y vitaminas, así como cita para acudir al médico nuevamente esta semana, según ha informado la cadena de televisión británica BBC.
El comunicado ha sido publicado apenas unos días después de que el ministro de Medio Ambiente de Reino Unido, Michael Gove, afirmara que no sabía lo que hacía Zaghari-Ratcliffe en Irán en el momento de su detención.
El ministro de Exteriores británico, Boris Johnson, ha tenido que salir al paso de las críticas, recalcando que el Gobierno "no tiene duda" de que se encontraba de vacaciones visitando a su familia, tal y como ha sostenido su esposo.
En octubre, las autoridades de Irán presentaron nuevos cargos contra Zaghari-Ratcliffe por presuntamente haberse unido a organizaciones que trabajan para derribar al Gobierno y por supuestamente participar en una manifestación frente a la Embajada de Irán en Londres.
Días después, el fiscal general de Irán, Abbas Yafari Dolatabadi, afirmó que la carta enviada por el ex primer ministro británico David Cameron pidiendo la liberación de la ciudadana británico-iraní "demuestra sus lazos con el Gobierno".
Zaghari-Ratcliffe fue detenida junto a su hija de dos años en abril de 2016 en el Aeropuerto Internacional Imam Jomeini, cuando intentaban regresar a Londres tras dos semanas en la capital, Teherán.
La mujer trabaja para la cadena de televisión británica BBC y la organización Thomson Reuters Foundation, vinculada a la agencia británica de noticias Reuters, que gestiona proyectos humanitarios a nivel mundial, si bien no opera en Irán.
Las autoridades iraníes aseguraron entonces que la mujer "estaba empleada por medios extranjeros y servicios de Inteligencia" y la acusó de fomentar "un golpe blando" contra el país.
En los últimos dos años, Irán ha detenido a más de una decena de ciudadanos con doble nacionalidad por cargos relacionados con la seguridad del país.