BEIRUT, 30 Ago. (Reuters/EP) -
El Estado Islámico ha destruido parte del Templo de Bel, el más importante de las ruinas de la ciudad romana de Palmira, en el centro del país, según ha informado el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos. Otros activistas han informado igualmente de la destrucción del templo de Bel a través de las redes sociales.
Por el momento se desconoce el alcance de los daños causados por los yihadistas en estas ruinas romanas tomadas el pasado mes de mayo y en las que estaban algunos de los restos arqueológicos romanos mejor conservados. La ciudad de Tadmur, la antigua Palmira, está ahora habitada por unas 50.000 personas.
Se trata del segundo templo de Palmira atacado por el Estado Islámico, que ya destruyó el Templo de Baalshamin el pasado 25 de agosto, un acto denunciado como crimen de guerra por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), que denunció que el atentado iba contra un símbolo del patrimonio cultural sirio y su diversidad.
Los yihadistas no han dudado en destruir con almádenas, explosivos y excavadoras otros restos de civilizaciones antiguas en Irak y Siria por considerarlos expresiones paganas. El Islam prohíbe cualquier representación figurativa más allá de los motivos geométricos o vegetales.