GINEBRA, 16 Jun. (Reuters/EP) -
Estado Islámico mantiene a unos 100.000 civiles retenidos en sus dos últimos reductos de la ciudad de Mosul, entre ellos y sobre todo la Ciudad Vieja, según las estimaciones del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
"Estos civiles son usados como escudos humanos en la casco histórico mientras los francotiradores matan a tiros a las familias que intentan escapar a pie o por barco, cruzando el Tigris", ha lamentado el representante de ACNUR para Irak, Bruno Geddo.
"No tienen comida, no tienen agua, no tienen electricidad ni tienen combustible. La situación es cada vez peor y están rodeados por combates", ha indicado Geddo en rueda de prensa desde Ginebra.
Ahora mismo las fuerzas iraquíes están trazando la estrategia de entrada en este laberinto que es el casco histórico de la ciudad, hogar de la mezquita y el minarete inclinado de Al Nuri, donde el líder de Estado Islámico proclamó el califato de la organización terrorista en 2014.
"La única forma de entrar es combatir a pie, casa por casa, es un laberinto de callejones, donde los francotiradores de Estado Islámico ejecutan a quienes intentan huir del territorio de lo que llaman 'califato'", ha lamentado.