El estado nigeriano de Zamfara ordena armar a la población civil debido al aumento de la violencia en Nigeria

MADRID, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -

El gobierno del estado de Zamfara, en el norte de Nigeria, ha pedido a la población civil que se arme debido a que en las últimas semanas se ha registrado un aumento de la inseguridad.

El secretario de comunicación del estado, Ibrahim Magaji Dosara, ha explicado que el comisario de la Policía de Zamfara, Ayuba Elkanah, tiene orden de emitir licencias de armas a todos los residentes capacitados para usarlas en defensa propia, informa el diario 'The Guardian'.

"Estos actos de terrorismo han sido motivo de preocupación para el pueblo y gobierno del estado", ha señalado Dosara, para quien las autoridades locales "no han tenido otra opción" que pedir a la población civil que se arme "para defenderse de los bandidos".

"El Gobierno está listo para ayudar a las personas, especialmente a nuestros agricultores, a obtener armas básicas para defenderse", ha dicho Dosara, quien también ha comunicado que se habilitarán centros para que la ciudadanía facilite información sobre posibles amenazas.

En ese sentido, el gobierno ha ordenado el reclutamiento de otros 200 guardias para cada uno de los 19 emiratos que conforman del estado, por lo que serán unos 500 por cada uno de ellos y "fortalecer así sus capacidades para hacer frente a los bandidos".

El anuncio del Gobierno se produce después de que grupos armados se hayan hecho ya con el control de algunas de las áreas del estado, como es el caso del distrito de Mada, en el área de Gusau, la capital del estado, según han denunciado sus residentes, informa el diario nigeriano 'Daily Post'.

"Hace varios días que no nos bañamos porque los famosos bandidos se han hecho con toda la zona y han vencido a los agentes de seguridad. Mientras hablo con ustedes ahora, no sé el paradero de mis dos esposas e hijos, no sé si han sido secuestrados o se han escapado", cuenta Mallan Ibrahim Mada, residente local.

Como consecuencia de este aumento de la violencia, las autoridades locales no solo han decidido armar a la población local, sino que también han prohibido la circulación de motocicletas, con órdenes de disparar a aquellos que las infrinjan, y han cerrado los mercados y las estaciones de servicio de las áreas afectadas.