Estados Unidos y Armenia discuten la crisis política en el país y la situación de Nagorno Karabaj

MADRID, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, han mantenido este viernes una llamada telefónica en la que han abordado la situación la crisis política del país y del proceso de paz en Nagorno Karabaj.

El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, ha enfatizado en un comunicado que Blinken ha reseñado al primer ministro de Armenia "la importancia del respeto por el estado de derecho y las instituciones democráticas y nuestro continuo apoyo al desarrollo de los procesos e instituciones democráticos" a lo que Pashinián ha agradecido a la parte estadounidense "su reconocimiento y disposición para brindar asistencia en el campo de las reformas".

El comunicado del ministro armenio ha destacado el asunto de la situación en el enclave de Nagorno Karabaj y ha desgranado que en la conversación "ambas partes hicieron hincapié en la necesidad de reanudar el proceso de paz" en consonancia con el Grupo de Minsk, creado por la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).

Pashinián ha incidido en la "necesidad de que Azerbaiyán devuelva de inmediato a los prisioneros de guerra, rehenes y personas en cautiverio" mientras que Estados Unidos únicamente se ha referido al asunto "acogiendo con satisfacción los esfuerzos realizados para lograr una solución política duradera del conflicto de Nagorno Karabaj en beneficio de la población de la región".

El presidente armenio ha sufrido una grave crisis política en las últimas semanas tras la petición de la oposición de su renuncia por el acuerdo con los presidentes de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, y de Rusia, Vladimir Putin, del cese a partir del 10 de noviembre de los combates en Nagorno Karabaj.

Asimismo, el primer ministro ha intentado cesar al jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, el general Onik Gasparián, por intentar perpetrar un golpe de Estado. Esta petición ha sido rechazada dos veces por el presidente armenio, Armen Sarkissian.

El acuerdo, en el que la anterior Administración del expresidente estadounidense Donald Trump anunció su mediación, supone para Armenia la pérdida de parte del territorio que controlaba en esta región bajo soberanía azerí pero autoproclamada como independiente.