WASHINGTON, 24 May. (Reuters/EP) -
Las fuerzas militares de Estados Unidos y Rusia han incrementado la comunicación para evitar accidentes aéreos durante sus respectivas operaciones en Siria, a pesar de que estos canales quedaron en entredicho tras el ataque ordenado en abril por el Gobierno de Donald Trump contra una base del régimen sirio.
El responsable de la Fuerza Aérea de Estados Unidos en Oriente Próximo, Jeffrey Harrigian, ha confirmado un aumento de las comunicaciones y ha reconocido la necesidad de este tipo de contactos "debido al reducido espacio aéreo" en el que se mueven ambos países.
Harrigian ha puesto como ejemplo de estas transmisiones una interceptación "poco profesional" que Rusia realizó de una aeronave estadounidense y que concluyó con las fuerzas rusas disculpándose tras las quejas de Estados Unidos. No obstante, el oficial ha dejado claro que no existe cooperación alguna en otros ámbitos con Rusia, aliada del régimen de Bashar al Assad.